Horas después de haber sido captado llorando en una conferencia de prensa, el alcalde de La Victoria, George Forsyth, utilizó sus redes sociales para explicar el motivo de su emoción, momento que quedó registrado por un medio de comunicación.
Las lágrimas de Forsyth fueron de felicidad luego de recuperar la cancha vecinal del barrio de Matute, lugar en el que se formó como futbolista junto a otros conocidos exjugadores de Alianza Lima.
“Hoy es un día que jamás olvidare. Muchos no saben, pero uno de los grandes objetivos por los cuales quería ser alcalde del distrito de La Victoria, era para recuperar la cancha de la unidad vecinal de Matute. Es en esta cancha donde yo me hice jugador de futbol, conocí a mis amigos de toda la vida y a mi segunda familia”, escribió.
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El burgomaestre criticó el estado en el que se encontraba dicho centro deportivo, el cual estará ahora en poder de la Municipalidad de La Victoria para su posterior mejora.
“Es cierto, estaba en muy mal estado, pero era una cancha de tamaño oficial e incluso tenia una pista atlética. Por ahí pasaron jugadores como Sandro Bailón, Pato Quinteros, Zorrito Aguirre, Walter Vílchez, Paolo Guerrero, Jefferson Farfán, Rinaldo Cruzado, Junior Visa, Wally Sánchez, etc”, comentó.
Criticó que en la gestión del expresidente Alan García, la cancha haya sido usada como depósito de carros viejos. Este hecho, según Forsyth, dejó sin la posibilidad de recrearse de los pequeños del vecindario.
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“Luego en el gobierno de Alan, no tuvieron mejor idea que cortarla por la mitad para construir un cementerio de carros viejos. Nunca logré entender, a qué ser humano se le iba a ocurrir destruir una cancha de futbol donde todos los niños del distrito tenían la oportunidad de jugar y ser libres, lejos de las drogas y la delincuencia”, sostuvo.
El campo deportivo estará por 20 años bajo la responsabilidad de la comuna que dirige tras la firma de un convenio con el Instituto Peruano del Deporte (IPD).
“Hay días en que uno se pregunta si realmente vale la pena tanto sacrificio. Vivir entre tantas amenazas de delincuentes que no quieren que las cosa cambien. Pero son días como hoy, que te demuestran que vale la pena cada minuto de esfuerzo y sacrificio que se entregó. Gracias Dios por este logro”, finalizó.