Jorge Muñoz, alcalde de Lima, confirmó que las obras que se estaban realizando en el inmueble de la avenida Abancay, en el Cercado de Lima, donde ocurrió un derrumbe y dejó a un albañil atrapado desde hace tres días, se ejecutaron de forma clandestina. Estas expresiones las brindó tras acudir al lugar, donde un equipo viene trabajando por rescatar a con vida a José Martín Huerto Garrido.
“Era una construcción clandestina efectivamente. Los bomberos están haciendo su trabajo en estos momentos. Esperemos puedan encontrar a la persona que está ahí. Esperemos que el rescate sea exitoso”, declaró a la prensa. Al ser consultado para que brinde más detalles de esta situación y del actuar de la comuna metropolitana frente a los trabajos en esa casa, Muñoz Wells se retiró del lugar a bordo de un vehículo.
Mario Casaretto, jefe territorial de los bomberos para Lima y Callao, informó esta mañana que miembros de USAR Perú, bomberos especializados en búsqueda de personas, y agentes de la Unidad de Rescate de la Policía Nacional están encargados de las labores de rescate del albañil Huerto Garrido de 53 años, quien quedó atrapado en el sótano de la citada propiedad, tras un derrumbe ocurrido el sábado pasado.
Detalló que el rescate está demandando un extremo cuidado debido a la inestabilidad del terreno y porque el albañil se encuentra en uno de los sótanos del inmueble, razón por la que el trabajo final está realizándose “a mano”. El ingreso de cualquier maquinaria podría terminar aplastándolo.
Indicó que el sótano donde se encuentra el albañil está obstaculizado con el adobe y la quincha que cayeron el sábado producto del derrumbe de inmueble, donde se realizaban labores de construcción clandestinas.
Intuyó que no recibieron el reporte de una persona desaparecida debido a que se trataba de una obra ilegal y que los albañiles huyeron apenas ocurrió el derrumbe. “Venimos haciendo el trabajo casi 18 horas. Es tedioso, pero con la esperanza de encontrar a esa persona con vida”, declaró para América Noticias.
“Son dos niveles de sótano construidos clandestinamente. La desgracia fue no tener a nadie en el momento [del derrumbe] que nos diga ‘nos falta un trabajador’. Todos huyeron, todos se fueron. No hubo nadie que diga nos falta una persona que estuvo trabajando”, agregó.
La familia de Huerto Garrido recién reportó su desaparición este lunes, tras no regresar a su vivienda desde el último sábado, y además por conocer que formaba parte de un grupo reducido de personas que laboraba en ese inmueble, por lo que sospecharon que podría estar debajo de los escombros. Él trabajaba hace tres meses en una construcción clandestina.