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No solo no tenían la ropa de seguridad adecuada, sino que estaban rodeados de equipos de acero y fierro que no permitían escapatoria ante una descarga eléctrica.
Correo accedió a las fotografías de la escena de muerte de Alexandra Porras y Gabriel Campos la mañana del domingo en un local de McDonald’s, en Pueblo Libre, cuando lavaban el piso según sus familiares.
En las imágenes, registradas por la Policía Nacional, se observa desorden en el cableado de los equipos eléctricos, reducido espacio para caminar y variedad de equipos metálicos.
“Todo lo que está alrededor es de acero, fierro. Entonces, no hay ningún lugar donde haya una madera, un aislante de corriente. Si se electrifica el área donde están ellos limpiando el piso mojado, como dicen, no hay forma de escapar de ahí”, dijo Mario Casaretto, jefe del Departamental de Bomberos de Lima.
SIN GUANTES NI BOTAS. Enfatizó que “un espacio tan reducido, siendo todo de metal (cooler de congelamiento, bandejas y dispensadora) y con una mala conexión” pone en peligro la vida de todos los que trabajan en ese ambiente.
Además, las fotos evidencian que ambos jóvenes no tenían puestos guantes ni botas aislantes de energía eléctrica, tampoco un overol, remarcó Casaretto.
En tanto, el rechazo a la cadena de comida rápida crece entre los ciudadanos. Ayer, un grupo de personas escribió “asesinos” en los muros de McDonald’s en Trujillo; y en un local de Arequipa pegaron afiches donde se lee "clausurado, explotación, muerte".
En Lima protestaron en los exteriores del local del Parque Kennedy, en Miraflores.
Por su parte, la ministra de Trabajo, Sylvia Cáceres, dijo, tras una reunión en la PCM, que la investigación sobre la muerte de los jóvenes trabajadores es “reservada”.
