Un promedio de 3,000 maestros de Piura marchan por las principales calles de la ciudad, a pesar que el Ministerio de Educación anunció que se aplicarán descuentos y despidos a los que persistan en la huelga nacional indefinida.
Con ataúdes de la ministra de Educación, Marilú Martens, y del gobernador regional de Piura, Reynaldo Hilbck Guzmán, se desplazan por las calles del centro de la ciudad. La Policía Nacional custodia el desplazamiento de los maestros para evitar cualquier desmán.
En plena plaza de armas, un grupo de docentes se pinchó los brazos y derramó un poco de sangre, como señal de disconformidad ante la propuesta del gobierno de aumentar el sueldo a 2,000 soles en diciembre. Ellos aseguran que ese monto es insuficiente.
Hoy se plegaron a la huelga indefinida los docentes de la sierra de la región, como la zona de Ayabaca y Huancabamba.
En el distrito de Piura hay una notoria ausencia de maestros, tal es el caso del emblemático colegio San Miguel, donde son pocos los docentes que están dictando clases.