Terror y llanto en incendio que arrasó con 42 casas

Un dantesco incendio que duró casi dos horas arrasó con 42 viviendas de material rústico y dejó en la calle a más de 120 personas que habitaban en los asentamientos humanos Santa Teresita y Santiago Zapata Silva, en la provincia de Sullana.

El fuego inició cerca de las 10:45 de la mañana de ayer, en uno de los inmuebles de la ampliación de la manzana G del A.H. Santiago Zapata Silva donde, según vecinos, se habría originado por una chispa que cayó a una pared de palma de coco y palos, tras haber estado quemando basura.

Rápidamente se extendió a las casas colindantes y las madres que se encontraban dentro con sus menores hijos, varios de ellos en sus clases virtuales, tuvieron que salir raudamente y pudieron sacar solo algunas cosas como televisores, equipos de sonidos y camas.

Lamentablemente, la falta de agua y el fuerte viento hicieron que el fuego consuma dos manzanas de dicho sector e, incluso, las llamas alcanzaron la manzana de la esquina de transversal Jorge Chávez y Virgen de Fátima del asentamiento humano Santa Teresita.

“Ha sido muy lamentable lo que hemos pasado, porque no había agua y con arena no se apagaban las llamas que se iban extendiendo poco a poco y ha dejado en la calle a diversas familias”, contó llorando una vecina cuando sacaba las cosas de su casa del A.H Santiago Zapata Silva.

Hasta el lugar se hicieron presentes diez cisternas de las compañías de los bomberos de Sullana y los distritos de Bellavista y Marcavelica, quienes durante casi dos horas pudieron apagar las llamas y, junto a los vecinos, tumbar las paredes para que el fuego no se siga propagando a los demás inmuebles.

Rescatan a un bebé y a varios niños

En medio de las llamas y mientras los vecinos corrían sacando sus cosas, una valiente madre identificada como Pamela Jiménez rescató a su bebé de tan solo 3 meses de edad que se había quedado dormida en su habitación.

Según las vecinas, la joven madre tuvo que ingresar a su dormitorio construido de material rústico que rápidamente había quedado envuelta en llamas.

“Ella (madre de la bebé) se ha metido a sacar a su bebe y pensaba que se había quemado, pero al abrir la colcha que estaba envuelta su hija, se dio cuenta que estaba bien, gracias a Dios”, contó una vecina.

Mientras que otras pobladoras indicaron que dos niños y hermanos de 4 y 5 años que se habían quedado solos en su vivienda que estaba envuelta en llamas, pudieron salir del fuego y ambos ponerse a buen recaudo en la casa de una vecina.

Perdieron lo que habían invertido

Entre los afectados figuran tres hombres quienes, producto de sus ahorros, habían comprado sus motocicletas para trasladar a sus familias y realizar las compras de la casa. No obstante, los vehículos quedaron completamente inservibles.

“Cinco minutos antes del incendio había salido de la casa y había dejado a mis dos hijas de 13 años y una bebé, y me llamaron que se estaba quemando la casa y me vine corriendo. Acá me percaté que ellas pudieron salir, pero todas las cosas y la motocicleta se quemaron”, dijo llorando y muy afectado, Julio Morán Farfán (30).

En tanto, Eliseo Requena Valdez, que es albañil y se encontraba trabajando en otro lugar, contó muy afligido que sus familiares solo pudieron sacar algunos enseres y que perdió toda la mercadería y el dinero de su esposa que es comerciante de plástico.

Mientras que otro de los damnificados, identificado como José Antonio Crisanto Requena (20), indicó que en el A.H. Santiago Zapata Silva lleva viviendo con sus seres queridos más de 10 años y se dedica a manejar mototaxi y, a la vez, criar patos. Sin embargo, tras quince minutos de incendio, estos animales y sus crías murieron quemados.

Ellos, junto a los otros perjudicados, pidieron ayuda urgente a las autoridades porque se han quedado en la calle.

Otro de los damnificados que prefirió no identificarse señaló que las llamas consumieron su casa construida con palos y palma de coco, pero que tuvo que ingresar para poder rescatar una caja donde guardaba más de 500 fotografías de sus seres queridos, algunos de ellos que habían fallecido en los últimos años.

Los vecinos que no se vieron afectados por el siniestro se reunieron con los damnificados y les señalaron que hoy iban a realizar una olla común en la zona para que todos puedan comer, sobre todo los niños, ya que muchos de ellos no podrán recibir sus clases virtuales como lo venían haciendo con el programa “Aprendo en casa”, del Ministerio de Educación (Minedu).