La denominada Segunda Reforma Agraria ha despertado diversas expectativas de parte de pobladores puneños. Algunos consideran que es un oportunidad para atender al pequeño producto del campo, otros, por el contrario, piensan que es demagógico hablar de reformas en el sector.
Como sabe, el pasado fin de semana, el presidente de la República, Pedro Castillo Terrones, hizo el lanzamiento de esta reforma en la región Cusco. Desde allí, prometió impulsar nueve ejes de desarrollo.
Y para el próximo 8 de octubre, se tiene prevista la visita del ministro de Agricultura a la región altiplánica, con el objetivo de replicar el lanzamiento y comprometer la participación del gobierno en la promoción de la agricultura nacional.
El alpaquero Honorio Checalla considera que la región Puno debe ser más cauta cuando se habla de una reforma agraria. “Qué vamos a hacer con el ministro, vamos a ponerle un poncho y hablará, pero nada más”, reflexionó al considerar la visita del ministro Victor Mayta como un simple acto protocolar.
En tal sentido, propuso realizar un diagnóstico situacional del agro puneño, tanto en asuntos como la seguridad hídrica, la propiedad de la tierra, el asunto de la tecnología, la seguridad jurídica, entre otros aspectos.
Para este fin, se convocó a una reunión de todos los representantes del sector agropecuario de la región Puno, actividad que se realizará este jueves 7 de octubre en la Dirección Regional Agraria con el objetivo de llegar a acuerdos multisectoriales para mejorar la producción rural.
En cambio, el catedrático indígena Jaime Núñez Huahuasoncco calificó esta reforma como una cortina de humo del presidente de la República, Pedro Castillo Terreno.
Aclaró que el Gobierno no tiene planes estratégicos, ni presupuesto para implementar esta reforma para los productores del campo, “son simples anuncios para aparentar que está con el medio rural”.
“Es una cortina de humo porque no anuncia las estrategias para su implementación, tampoco ha detallado de sus sostenibilidad”, declaró el productor quechua.