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El esfuerzo valió la pena. Los jueces tacneños Edwin Ordóñez Medina y Enrique Pinto Flores acaban de marcar la pauta en el arbitraje local tras su ascenso al fútbol profesional peruano luego de superar diversas etapas del curso elite que rindió la Comisión Nacional de Árbitros en Lima, y que a través del Circular N° 002 - FPF - CONAR - 2016 se dio la buena nueva que entró en vigencia ayer. Este anuncio se dio a conocer mediante una conferencia de prensa que realizó brindó la Liga Departamental de Fútbol de Tacna al mando de su presidente, Juan Quispe Cáceres quien también forma parte del directorio de la Federación Peruana de Fútbol.

¿CÓMO LO LOGRARON?. El curso elite nacional que recibieron fue sumamente exigente, todo empezó con una invitación que se le hizo llegar a todas las ligas departamentales un 14 de junio del 2015 donde la Comisión de Árbitros de Tacna designó a dos hombres para que vayan en calidad de árbitros principales entre quienes destacó Ordóñez y dos hombres para árbitros asistentes donde calificó Pinto. Cabe resaltar que a nivel nacional un total de 36 árbitros principales acudieron al curso, mientras que 38 fueron asistentes, pero solo 3 de cada rama lograron superar las tres etapas evaluativas donde median el conocimiento teórico, pruebas físicas y técnicas siendo los tacneños los dos hombres más jóvenes que ingresaron al staff de árbitros de la CONAR-FPF.

LOS PROTAGONISTAS. Para Ordóñez esta nueva designación es un peldaño más que escaló en su carrera como árbitro que le permitirá darse a conocer. “Esta noticia le ha dado a mi vida un giro de 180 grados porque es una responsabilidad muy grande. Ahora el primer partido donde nos designen significará que debemos dejar el 1000% para que sepan que el arbitraje en provincias esta igual o casi cerca del arbitraje limeño. La idea ahora es mantenernos en esta categoría y justo hoy (ayer) iniciamos la pretemporada de entrenamientos que por ser árbitros de primera se tienen que intensificar de 3 a 4 veces por semana”.

Por su parte, Pinto viene evaluando la idea de residir en Lima para tener mayor roce y oportunidades que lo lleven a cumplir su objetivo siguiente que es el ser árbitro FIFA. “Esto forma parte de un sueño que me he trazado, nosotros somos conscientes que la competencia ahora será muy dura. Ahora junto a Edwin venimos evaluando la idea de trabajar en Lima para seguir aprendiendo y sobresalir. Yo lucharé para obtener con honores la insignia FIFA”, dijo.