Macabro hallazgo en el centro poblado Augusto B. Leguía en Tacna. (Foto: Difusión)
Macabro hallazgo en el centro poblado Augusto B. Leguía en Tacna. (Foto: Difusión)

Personal policial investiga el deceso de una joven hallada en estado de descomposición dentro de la habitación que alquilaba en una casa del centro poblado Augusto B. Leguía en la ciudad de Tacna.

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El descubrimiento se dio cuando la progenitora con un efectivo conminaron al propietario de la vivienda ubicada en la manzana 18 lote 32 de la asociación Villa Cristo Rey a que abriera la puerta, ya que su hija se encontraba incomunicada desde el 15 de mayo. La mujer indicó que desde hace varios días intentó comunicarse con su vástaga, sin embargo no respondía las llamadas ni mensajes.

Dueño se negó a abrir habitación

Es así que viajó desde Puno hasta Tacna para verificar si su hija se encontraba bien de salud. Al llegar el propietario de la casa, David Medina Quispe (62), se negó a abrirle la puerta manifestando que temía que se perdiera algo de la habitación y le echaran la culpa.

La madre Flora Sucapuca Mamani (43) se mostró sorprendida porque el propietario la conocía ya que ayudó a su hija a instalarse. Contó que su hija Flor Verónica Ccari Sucapuca radicaba en Tacna hace un año y trabajaba en un hospedaje. Al acercarse a la puerta de su habitación que da a la calle sintieron un fuerte hedor y encontraron a la joven en estado de descomposición.

Joven habría muerto hace diez días

De inmediato se convocó a Criminalística y Homicidios, así como al fiscal Juan Ticona Málaga. Preliminarmente se calculó que la joven habría muerto hace 10 días. La madre aseguró que su hija mantenía una relación con un joven llamado “Elías”.

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Puso en duda la hipótesis de que su hija se hubiera suicidado ya que incluso antes de perder comunicación estaba comprando muebles y menajes para acondicionar su habitación.

Propietario niega estar involucrado

La progenitora manifestó que su hija criaba cinco perritos y en la habitación solo habían dos. Vecinos se sorprendieron al saber que el dueño también oía a los perros llorar de hambre y pese a ello no se acercó a indagar qué es lo que ocurría en dicho ambiente.

El propietario negó cualquier participación en la muerte de la joven. Incluso dijo que él quería formalizar el contrato de alquiler pero la joven no le facilitaba su documento de identidad y evitaba cualquier contacto. El cadáver fue trasladado a la morgue central de Tacna a fin de que se le practique la necropsia y determinar las causas de su muerte.