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A diferencia de otras ocasiones, el clima, la participación comunal y las ganas por conocer más de este ancestral rito hicieron que el primer Chaku en Tacna sea un momento casi histórico. Más de un centenar de ganaderos participaron el último domingo de la reunión, esquila y liberación de vicuñas silvestres que habitan los alrededores de la comunidad campesina del Alto Perú en el distrito de Palca.

“Desperté junto a mi familia cerca de las 4 de la mañana para dirigirme al cerco que días antes preparamos junto a los comuneros. Habían buenas noticias después de todo”, señaló Eusebio Torres, quien participó de la ancestral actividad y que concluyó con la extracción de 7 kilogramos de fina fibra.

Así como cualquier otra ceremonia, el chaku tiene protocolos que seguir. Lo hicieron los antiguos y lo seguirán haciendo las generaciones venideras. Lo usual es que el chamán bendiga a las especies juveniles luego que los habitantes las cerquen. La primera jornada duró cerca de 6 horas y contabilizando hasta la vicuña más pequeña había en total 32.

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“Lo que queremos es generar nuevas fuentes de ingreso para nuestros comuneros, sé que nunca se dio un chaku pero no es tarde para usar nuestros recursos renovables, expresó el alcalde de la jurisdicción, Wilber Tapia Alave.

El precio del kilogramo de fibra oscila en los US$ 370, siendo países como Argentina y Chile los que más cotizan su venta. “Es cuestión de tiempo para que compradores lleguen a adquirir la fibra; los animalitos también se lo merecían”, refirió la autoridad.

El siguiente paso del ritual consistió en la celebración del matrimonio de las especies. Se escogió al azar a un macho y una hembra, a las que se les bautizó con los nombres de “Marcos” y “Cecilia”. Ambos animales marcaron el inicio de una faena que concluyó pasado el mediodía. “Siete kilogramos de fibra no esta mal para ser nuestra primera vez. trabajaremos para que al siguiente año logremos reunir hasta 100 ejemplares”, detalló Eusebio, quien es representante de Alto Perú.

Actuaciones como la desarrollada por esta comunidad esperan contribuir a la vigilancia de la caza furtiva que se vio en zonas alejadas como Sencca y Cueva, sectores donde se pretende llevar proyectos de similar envergadura.

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