Patricio Suárez Vértiz, músico y compositor
Patricio Suárez Vértiz, músico y compositor

“Con mucha humildad te lo digo, me quedo sorprendido, cómo hasta ahora, la gente no se olvida de Arena Hash”, nos dice desde Miami, Patricio Suárez Vértiz, fundador de la banda peruana que integró junto a su hermano Pedro, Christian Meier y Arturo Pomar.  El músico, que vive en Miami hace 17 años, reaparecerá este 4 de diciembre como conductor del Festival online Rok an Pop (Teleticket Play), evento que lo tiene entusiasmado.

La nostalgia pesa mucho en el corazón de los fanáticos...

Cuando yo llego a un evento y encuentro gente esperándome como si no hubieran pasado tantos años de la despedida de Arena Hash, me emociono. Me ven y siento que piensan: ‘¿Todavía sigues vivo?’. No sé si te ha pasado que, de repente, no llegaste a ver a un artista que te gustaba por distintas razones, pero luego con tu trabajo lo tienes frente tuyo y no puedes evitar decirle: ‘no sabes cómo te admiraba’. Eso es lo que pasa con los fanáticos de Arena Hash hoy, que también son los hijos de ellos, los hermanos menores, los de nuestra misma época. Todos están hermanados por ese mismo sentimiento.

¿Cuál es la razón de la vigencia del grupo?

Creo que todo nace de la unión de cuatro personas que teníamos química y nos juntamos para armar un  proyecto. Esa química se proyectó hacía la gente, había carisma. La música es importante en una banda, claro que sí,  pero sin carisma no es lo mismo.

Puedes tener la mejor voz, o los músicos más talentosos en un grupo, pero si no llegas a la gente estás acabado.

El contacto entre el artista y el público es vital. Por ejemplo, cantantes mejores que Frank Sinatra quizás habrán existido, pero él se se paraba en el escenario y caía bien, parecía tu pata. Con Arena Hash pasaba que la gente sentía que nos conocía y nos trataban como muy cercanos. El grupo fue el perfecto medio, ni muy arriba, ni muy abajo, ni tan a los costados, unió todo estrato social, económico, cultural. Le caíamos bien a todos y lo único que queríamos era hacer buena música y divertirnos.

Con solo dos discos lograron una popularidad abrumadora...

La gente piensa que sacamos como diez álbumes, es increíble, y me da risa cuando conoces bandas nuevas y dicen: ‘Nosotros estamos sacando nuestro álbum número siete’. Y pocos los conocen, que  loco, recuerdo que en mi época sacar un álbum era todo un acontecimiento. Para entrar al estudio de grabación tenías que ir bien vestido; era como un rito.

¿Luego de la separación de Arena Hash no los tentaban con la palabra reencuentro?

Cada cinco años nos llegaba una propuesta, una más tentadora que la otra.

¿Y qué sucedía?

Cada uno estaba en lo suyo, Yo con un contrato en Miami, Christian estaba grabando una telenovela, Pedro con una agenda muy recargada y Arturo en sus proyectos. Juntarnos entonces era bien difícil, además un concierto de reencuentro puede durar dos horas, pero preparar el regreso toma un año y medio de producción. Si Arena Hash se juntaba, no podía ser cualquier concierto, tenía que ser algo alucinante.

¿Tu regreso al Perú tras 17 años tiene fecha ya?

Me están tentando para ir, y lo que he pensado en un futuro, con Arturo Pomar, es hacer un espectáculo musical inspirado en Arena Hash, no puede ser Arena Hash por motivos obvios. Los fanáticos siempre me escriben y me piden algo así para recordar épocas en las que la música del grupo los acompañó. Lo más próximo que se puede hacer serán tres conciertos titulados: “La experiencia Arena Hash”.

Mientras ese rencuentro se produzca, los fans te pueden ver este 5 en el Rok An Pop.

Y estoy muy entusiasmado de estar al frente de un espectáculo en el que estará Libido y Jeffry Fischman, We The Lion y Temple Sour. Será la oportunidad de reencontrarme con tanta gente que nos sigue recordando y de la que voy a estar agradecido siempre.

Perfil

Patricio Suárez Vértiz es músico. Los discos Arena Hash (1987) y Ah Ah Ah (1991) marcaron su carrera musical que finalmente lo llevó a iniciar su faceta como solista. Desde Miami ha lanzado su último disco llamado “Luckyou”.