Pedro Suárez-Vértiz: "Me encantaría volver a los escenarios"

Tras el lanzamiento de su libro, Yo, Pedro (Planeta), el reconocido rockero nacional Pedro Suárez-Vértiz ofreció una entrevista a Correo vía e-mail para hablarnos de su primera publicación, sus próximos proyectos musicales, sus deseos y otros asuntos.

El intérprete de Cuando pienses en volver, que tiene dificultades para vocalizar bien (disartria), también recuerda cuándo y cómo fue su último concierto.

CORREO: ¿Qué te motivó aceptar la propuesta de Planeta para escribir tu libro?

PEDRO SUÁREZ-VÉRTIZ: Mi manager (Robelo Calderón) es un compañero, amigo, hermano de muchos años, que me dijo cuando dejé de cantar: "No pasa nada, siempre habrá algo que hacer". Y me llamaba todos los días, me mandaba e-mails con diferentes propuestas: publicidad, cine, arte infantil, escritura, etc. No permitió que me entumezca. Poco a poco, fuimos evaluando la actividad que más me acomodaba y la que menos campaña requería en cuanto a que yo participara en ella. La propuesta de Planeta fue la mejor. Intervenía creación, producción y distribución, igualito que los discos. Entonces, era algo que me nacía y que entendíamos. Tenía el tiempo libre. La gente no me veía en entrevistas, uno de mis fuertes, hacía tiempo, entonces vimos que había demanda de aquel: Opiniones y reflexiones. Y eso ofrecimos nuevamente, pero en otro formato.

C: ¿Qué reflexión te ha dejado al final la publicación?

PS-V: Solo me ha dejado ganas de seguir escribiendo. Ahí plasmo exactamente todo lo que pasó por mi mente en tiempo real mientras lo escribía. Sentía una idea y la desarrollaba como quien extiende un trazo en el lienzo y acaba haciendo un cuadro. Hubo mucha coincidencia con el trabajo creativo musical y gráfico.

C: ¿Quedaste satisfecho con todo lo que has contado ahí?, ¿es cierto que ya quieres escribir tu siguiente libro?

PS-V: Es totalmente cierto que quiero seguir escribiendo. Sin hacerlo, podrían sacar una segunda parte mañana. Hay mucho material no incluido y no por baja calidad sino por tener otro tenor. Quedé muy satisfecho con cómo quedó. Desconfiaba un poco porque no es como cuando grabas, que llegas hasta el final viendo cómo va quedando la música. Acá entregas tus escritos, discutes la carátula y hasta ahí llegaste. Pero debo admitir que quedó increíble.

C: Creo que tu libro se va a vender como "pan caliente" y que será un éxito, porque estoy seguro de que muchos quieren saber cómo estás y qué piensas de ti mismo, del momento que te ha tocado vivir, etc. Pero también creo que no faltará gente que se aproveche de aquello y lo piratee. ¿Qué podrías comentarnos al respecto?

PS-V: Es curioso, esa perspectiva de saber cómo estoy y cómo me siento es totalmente periodística. El público ni pregunta por eso y hasta se saltean esa tediosa parte inicial del libro en que detallo mi problema. Tengo casi un millón de seguidores en Facebook, y absolutamente nadie me pregunta aquello que citas. Esa película hindú que algunos hacen con mi nueva condición, poco o nada le interesa a la gente. Puedes comprobarlo. Yo soy fan de Los (Rolling) Stones y uno de ellos tuvo cáncer a la garganta (el baterista Charlie Watts). A mí no me interesa averiguar cómo se sintió ni cómo lo superó. ¿Para qué detenerse en eso? Solo pienso en lo que este artista le da al mundo. El interés periodístico es uno y el de la opinión pública es otro, así se crea que son lo mismo. Ojo con eso. Con respecto a la piratería, no se puede hacer nada. Solo competir con un bajo precio y un arte llamativo e incopiable. Vamos bien con el asunto.

C: Después de ser consciente del problema que no te permite vocalizar bien, ¿qué planeó tu mente?, ¿qué te motiva a ser fuerte para, digámoslo así, resurgir o empezar un nueva vida? ¿Cuánto demoraste en asumirlo?

PS-V: Nunca me angustié. Tengo una familia y debía seguir manejándola. No hay resurgimiento alguno o nueva vida. Todo se encauza nuevamente por un tema de lógica. Eso siempre ocurre, pero al inicio muchos decaen por temor. Es decir, se tumban ellos mismos. Confía en que todo se arregla. No hubo proceso para asumirlo. Ha sido tan lenta la evolución de mi problema que la preocupación no tuvo incentivos. Al principio, las especulaciones y dramatizaciones de mi problema en prensa sí me afectaron. Se asustó a mucha gente y no era justo. Tengo muchos parientes y amigos fuera que recibían esa horrible desinformación. Sí, sufrí un estrés terrible. Jamás había sido dañado por la prensa y me pasó en un momento muy delicado.

C: Todo aquel que sigue tu carrera musical, en el Perú y en el extranjero, aún debe guardar la esperanza de verte cantar nuevamente en los escenarios con tu piano o tu guitarra. ¿Qué podrías decirle a ese público que sueña con ver brillar otra vez a su estrella de rock en una tarima?

PS-V: La verdad que no tengo idea. La fama me agobia un poco. Es muy demandante emocionalmente y eso no me hace bien. No puedo desgastarme porque las ansias me invaden y me sobreestimulo. Así que toco piano. A la gente que me espera les diría que muchas gracias por tener una necesidad que lleva mi nombre. Me encantaría volver al escenario, es verdad, pero la atención del público hoy también trae una yapa y esa es el hurgamiento periodístico sobre cómo me desenvolveré, cómo cantaré, en qué fallaré. Si doy un concierto increíble, apoteósico y, si en un solo momento resbalo, esa será la única noticia. No me resulta entonces muy provocativo someterme a eso por ahora.

C: Tú prometiste en tu Facebook oficial que jamás abandonarías la música. En ese sentido, ¿en qué planeas trabajar ahora?

PS-V: Estoy en proyectos privados y además tengo un álbum completo sin publicar (con influencias amazónicas). Me gusta la música muchísimo y tengo ganas de que el público conozca esas canciones, que sé que les encantará.

C: En una reciente entrevista, contaste que tienes un disco hecho y que planeas lanzarlo este año o el próximo. ¿Cuándo empezaste a trabajarlo y cuándo lo terminaste?

PS-V: Lo empecé en el 2011 y ya está todo grabado, solo falta la postproducción.

C: ¿Cuál es el mensaje que engloba este nuevo material discográfico?

PS-V: El mensaje es amor a la vida, a la naturaleza, al amor.

C: ¿Ya tiene nombre?

PS-V: Cambia cada mes. Siempre se me ocurre uno nuevo.

C: ¿Qué nos puedes adelantar sobre este nuevo álbum?

PS-V: Que es muy melódico, muy coral. Tiene lo que más ha gustado de mí en toda mi trayectoria, e intento mostrar -a mi manera- nuestra cultura.

C: ¿Cómo recuerdas el último concierto que ofreciste?, ¿podrías precisarnos cuándo fue y dónde? Lo que pude averiguar, no sé si sea exacto, es que fue el 29 de julio de 2011 en el C.C. María Angola. Pero también hay un registro de una presentación que salió en un programa de Plus TV, en setiembre de ese mismo año. ¿Podrías confirmarlo?

PS-V: El último fue en el María Angola, uno de los mejores conciertos de mi vida. Repleto. Canté todo. Posteriormente, grabé el especial de Plus TV completamente en vivo y de ahí más nada.

C: La APDAYC te tramita una pensión de gracia y sabemos que la idea no nació de ti sino de esta organización y que no estás en bancarrota, como lo has manifestado. Sin embargo, ahora se ha generado una polémica sobre quiénes deberían acceder a este beneficio económico que otorga el Estado. Que por qué los artistas, por qué no el emolientero, el lustrabotas, el taxista, el que vive en la miseria, los futbolistas en el abandono, etc. Quería saber qué piensas concretamente al respecto, dado que tampoco lo has rechazado.

PS-V: La pensión de gracia es un honor para quienes han enaltecido al país con su legado intelectual o artístico. Son como las Palmas Magisteriales. No tiene nada que ver con otras actividades. Es decir, así metas 20 goles en un Mundial no te las van a dar. Son rubros de clasificación totalmente distintos. El esfuerzo del emolientero, lustrabotas, empresarios o astronautas peruanos, si lo quieres ver así, no tiene nada que ver con el legado artístico. Es como que yo reclame laureles deportivos. Es mejor que se tomen todo el tiempo del mundo, porque ahorita no es momento para mí de tomar decisiones al respecto ni para los encargados de evaluarlo. Comentarios en la web deseándole a Eva Ayllón o a Pepe Vásquez que se pongan a vender caramelos o a pedir limosna, en vez de recibir reconocimiento, ya no son comentarios, son aberraciones. No puedes considerar eso como parte de la opinión pública. No te dejes influenciar por los insultadores anónimos. En caso me la otorguen, yo haré lo que la gente diga, no lo que los insultadores anónimos digan.