Rebeca Escribens decidió contar en sus redes sociales sobre el proceso que pasó luego de enterarse que padecía cáncer de la piel.
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La conductora de TV confesó que un extraño lugar hizo que acudiera con un dermatólogo, quien le informó que se trataba de un malanoma insitu o cáncer de piel: “Un lunar raro en mi tobillo me hizo correr al dermatólogo. En efecto, era un melanoma insitu, cáncer de piel. Quedé en shock. Por mi cabeza pasaron pensamientos catastróficos. Lloré, peleé con ellos, los abracé y ahora, contándoles lo sucedido”.
Además, mencionó no podrá exponerse por mucho tiempo al sol por recomendaciones de su médico: “Nunca más sol directo, entre otras costumbres que tendré que modificar. Paso a paso. Ya les iré contando. ¡Lo importante es que estoy bien y con más ganas de vivir que nunca! Gracias, primo querido, eres el mejor dermatólogo oncólogo del mundo mundial”.
Además, su primo, el dermatólogo oncólogo que la atendió, explicó que pudo extraer el lunar por una intervención ambulatoria. No obstante, le recomendó a Escribens que debe realizarse chequeos cada cierto tiempo.
“Un chequeo cada tres meses, seis meses al año y siempre verte. Usa bloqueador, sancochadas en el sol, nunca más”, le recomendó el médico. Asimismo, Rebeca Escribens confirmó que está fuera de peligro: “La buena noticia es que estoy sana”.
