¿Puede un simple mortal detectar la mala vibra detrás de alguien que aparenta bondad? Pues Rosa María Cifuentes, magister en Periodismo, especialista en morfopsicología y comunicación no verbal, considera que luego de leer su más reciente libro “El mal acecha”, podremos al menos adelantarnos e identificar cuando corremos peligro en una sociedad cada vez más violenta.

“Hace falta ayudar a la gente, hacerle entender, que hay momentos en los que los individuos se desvían del camino, pero sobre todo, hay que recordar que existe más maldad y hay que aprender a enfrentarla para defendernos. Hace falta psicoeducar a las personas,  por eso, el título tan contundente del libro: ‘El mal acecha’”, dice la autora.

¿Dices que con un solo gesto basta para darnos cuenta a quién le caemos mal?

Sí, totalmente, por ejemplo, vamos a suponer que repente un familiar tuyo se está comprometiendo y de entre el grupo de amigas, hay una que mirando a los novios coge el vaso del brindis con rabia y hace una mueca en la boca; pues ya nos podemos dar cuenta que esa señorita no le gusta esa felicidad. O cuando conoces a tu suegra por primera vez y de repente le quieres dar un abrazo, pero la señora simplemente no te lo da, te pone las manos sobre el hombro, como diciendo: hasta ahí nomás llega a hijito, no vamos a ser íntimos.

Son detalles que muchas veces no le damos importancia.

No es que no nos demos cuenta, es que la gente se queda callada. Como te repetía, hace falta psicoeducar a las personas y enseñarles a protegerse, identificar a quienes buscan agredirnos,  porque hasta nos topamos con jefes psicópatas.

Eso que, detrás de una persona aparentemente normal haya un psicópata son palabras mayores...

Hay muchas personas muy enfermas con su gente, le dan la contra en todo, te amarran los papeles, buscan problemas, esas personas tienen ansiedad generalizada y problemas de depresión endógena o refractaria. Lo malo es que no se han hecho un diagnóstico, su cerebro enfermo los hace actuar de una forma insoportable, normalmente se vuelven malas personas. Aunque hay algunos malos que son adorables.

Y en el plano personal, ¿cómo darnos cuenta si estamos al frente de una buena o mala persona?

Para empezar, la forma en la que te saludan, cuando alguien te da la mano, si es el caso de un varón, existen personas que no te la dan por completo, te cogen solamente los cuatro dedos. Otra cosa es cómo te miran, hay gente que te barre con la mirada, pero de una forma fea, es distinto cuando te miran con admiración, te sonríen y te hablan bien. También se debe tener mucho cuidado con el paralenguaje, que es el tono con el que te hablan, allí también podemos percibir que podríamos tener problemas.

¿Cómo salir de estos escenarios en los que te pusieron malas personas en un ambiente laboral?

El consejo que puedo dar es que hay que enfrentarlos, desenmascararlos, hay gente que se calla, yo particularmente soy de actuar. Pero hay que conseguir pruebas, también es importante identificar qué clase de enemigo tienes al frente, uno tiene que saber siempre de dónde viene.

ROSA MARÍA CIFUENTES

Magister en periodismo. Coach ontológico, catedrática , luego del éxito en ventas de “Miénteme si puedes”, presenta “El mal acecha: lenguaje no verbal de perversos, delincuentes, psicópatas y asesinos.

TAGS RELACIONADOS