Conocer las bondades de un buen ginebra es una particularidad que pocos conocen, sobre todo en épocas donde la reinvención de muchas bebidas clásicas ha creado una competencia de marcas en el mercado nacional.
La marca The Botanist reveló su gin premium bajo la destilería Bruichladdich en Islay, una isla ubicada al norte de Escocia. Contiene 31 botánicos, 22 de los cuales son plantas autóctonas de la propia isla que se recogen a mano, eso explica el hecho de que los nombres científicos de los 22 botánicos se encuentren grabados en la superficie de la botella.
Durante la cata en nariz se aprecia más su complejidad aromática donde destacan el enebro, notas florales, herbales y terrosas. En boca se perciben notas cítricas, herbales y florales de carácter más dulce, pero con un final más seco y ligeramente amargo por la tierra o raíces.
Esta invención en gin es muy aromático, con sabor a hierbas y flores, complementado con notas cítricas y terrosas. Para lograr un sabor delicioso e único, el producto pasa por una destilación muy lenta que dura hasta 3 veces más de lo habitual, de modo que se capte la esencia de los 22 botánicos.