Alrededor de 30 jóvenes con síndrome de Down atienden la cafetería "Córdica 21", ubicado en la ciudad de Guadalajara, en Jalisco (México).
La iniciativa busca fomentar la inclusión brindando trabajo a los jóvenes para que se desempeñen como reposteros y meseros en el café.
"Es un taller de capacitación laboral pero abierto al público, para romper poco a poco la esfera de sobreprotección en la que normalmente tienen a las personas con discapacidad", dijo la directora, Laura Ruiz Borrayo, a Efe.
El local está ubicado en la planta baja del colegio del que los jóvenes egresaron. Mientras que cinco mujeres y siete hombres atienden a los clientes alternando turnos para evitar quedar sobrecargados de sus labores, otros 18 jóvenes permanecen en la cocina preparando galletas y pasteles.
Mejorar su autoestima
"El objetivo de nuestra cafetería es mejorar su autoestima, mejorar su independencia en su casa, que es donde queremos ver los resultados, y también mostrar ese mensaje a la sociedad de que son capaces y que como cualquier persona tienen mucho que ofrecer al mundo", indica Ruiz Borrayo.Ricardo Limón Carranza, uno de los meseros de "Córdica 21", indica que "ama" esta iniciativa por "las enseñanzas" que brinda a los chicos con síndrome de Down: "No es fácil tener una cafetería; esto es un plus para las personas con síndrome de Down. A los compañeros les sirve de experiencia porque ellos también aportan. Somos un equipo".
Además, cuenta que el café "fue un boom" con solo dos semanas de inauguración.
Gente humana
"Nosotros somos gente humana, no estamos en casa, no estamos con las manos atadas, no estamos encerrados, sino al contrario, tenemos que desarrollarnos en la vida cotidiana", explica.La iniciativa surgió hace un par de años para dar opciones de desarrollo laboral y experiencia a jóvenes con síndrome de Down que son mayores de edad y ya terminaron sus estudios en el colegio.
Organización
La asociación "Córdica 21" tiene 10 años de antigüedad y se dedica a impulsar el desarrollo escolar, social y deportivo de niñas y jóvenes con síndrome de Down.El proyecto se hizo realidad tras un esfuerzo de los padres de familia y algunos benefactores. Además de brindar experiencia, los jóvenes son remunerados económicamente para que se sientan "orgullosos" y "productivos como cualquier persona".
Asimismo, "Córdica 21" espera abrir otros negocios en Guadalajara y otros lugares de México: "Esperemos que sea una realidad a corto plazo abrir más cafeterías inclusivas y emplear a más personas con síndrome de Down y con discapacidad intelectual".