Hoy se cumplen dos años desde que Japón fue sorprendido por un terremoto y posterior tsunami que dejó más de 18 mil 500 muertos y desaparecidos.

Sin embargo, unas fotografías dan cuenta que poco queda de las calles llenas de escombros e inundadas de agua del mar.

Ahora los lugares lucen limpios y sin escombro alguno, a diferencia de la ciudad de Pisco que también fue azotada por un terremoto en agosto del 2007 y que aún muestra los estragos de la naturaleza.