Dieciocho civiles murieron y cinco más resultaron heridos por la explosión de una mina al paso de la furgoneta en la que viajaban cuando se dirigían a una boda.

El jefe provincial de la Policía, Aqa Noor Kentos, informó que la explosión ocurrió en el distrito de Push e Rod, de la provincia occidental de Farah.

La fuente afirmó que la furgoneta se dirigía al distrito de Khaki Safed, perteneciente a la misma provincia y situado al norte del lugar donde se produjo la detonación.

Los artefactos explosivos improvisados (IED, siglas en inglés) son junto a los atentados suicidas los métodos más recurrentes de los talibanes para golpear a las fuerzas afganas e internacionales, aunque en la práctica causan un elevado número de víctimas civiles.

Con información de EFE