La jueza alemana Karin Jung decidió sentenciar a dos hinchas del 1860 Munich por actos de vandalismo con un castigo ejemplar. Les dio a elegir entre ponerse la camiseta del equipo rival más enconado o pasar 15 meses en prisión.
La magistrada comentó que la finalidad de la sentencia es mostrar que el fútbol es fútbol y no un campo de batalla. El caso se remonta a agosto de 2014, tras un encuentro deportivo realizado ese mes, tres hinchas del 1860 Munich maltrataron a un aficionado del Bayern, lo dejaron semidesnudo en la estación de un tren a un aficionado del Bayern, tras romperle la chaqueta.
Dos de los tres hinchas fueron denunciados y llevados a juicio por vandalismo futbolero. Sin embargo, ellos no querían disculparse con su víctima y también se negaron a revelar el nombre de una tercera persona involucrada en la agresión.
Debido a ello, la jueza Jung decidió que los castigaría con algo que realmente les doliera. "Pensé en algo que fuera algo realmente doloroso, que molestara a este tipo de gente", dijo al diario alemán Bild.
Al escuchar la sentencia los hinchas se tragaron el orgullo y optaron gastar algunos euros en la tienda del Bayern Munich, también se disculparon con el hincha del Bayern.
Según la BBC en español los gastos fueron onerosos y además entregaron una compensación de US$500 a la víctima del ataque.