El Congreso tiene la gran oportunidad de reivindicarse. Hoy debatirá y luego votará la moción de censura contra el ministro de Salud, Hernán Condori, uno de los funcionarios del Gobierno con más cuestionamientos y rechazo de la población. Para muestra un botón, según la última encuesta de IEP, el 59% de peruanos desaprueba su gestión. Ya es momento que el Legislativo se ponga a la altura de las expectativas de la gente.
El pedido de censura fue presentado por 33 legisladores, pero todo indica que más de 66 decidirán hoy su destitución. Por primera vez las bancadas de Avanza País, Fuerza Popular, Juntos por el Perú y Alianza para el Progreso están de acuerdo con la salida de Condori. Hasta un legislador de Perú Libre, Jorge Marticorena, ha dejado en claro que hubiera buscado otra persona para el Minsa.
Lo de Condori es indefendible. No solo por sus disparatadas propuestas cuando trabajaba en la provincia de Chanchamayo, Junín, que hablan de su poca idoneidad, sino por los pobres resultados en la lucha contra la COVID-19. Es evidente que en una coyuntura tan difícil como la que atraviesa el país debido a la pandemia del coronavirus, no se puede experimentar con personajes como el titular de Salud. Ello significaría experimentar con el futuro y la vida de millones de peruanos.