El sábado último, la Policía Nacional allanó un búnker en Comas donde fueron arrestados 25 sujetos que se dedicaban al préstamo extorsivo llamado “gota a gota”. Tenían armas y explosivos para amedrentar a sus víctimas, y además eran el terror de los vecinos del condominio desde donde operaban estos delincuentes.
Sin embargo, no sería extraño que estos indeseables estén libres en unos días gracias al catastrófico Ministerio Público que tenemos, el mismo que hace poco puso nuevamente en la calle a uno de los acusados de ser parte de la organización que acabó a balazos con el empresario secuestrado Machiavelli Laura en el distrito de Santa Anita.
Lamentablemente el Ministerio Público a veces de la mano con el Poder Judicial, no ofrece ninguna garantía al ciudadano de que los delincuentes capturados incluso con considerables evidencias, se quedarán adentro por un buen tiempo, es decir, que recibirán al menos prisión preventiva mientras son investigados y procesados.
Esto ya no parece ineptitud o desidia de parte de los magistrados, sino más bien complicidad con el delito. Sería bueno que en su momento, estos caballeros sean denunciados como parte de estas bandas, pues en la práctica se convierten en sus brazos extendidos en el sistema de justicia, para seguir operando con impunidad.