Compararemos al Perú con países vecinos, salvo Brasil, observando el porcentaje del PBI dedicado a Defensa entre 1960-2022. Ecuador de 1995-98 elevo inversión a 2,4%. Tras finalizar guerra del Cenepa ambos países redujimos ese financiamiento. Pero mientras Perú llegaba a 1,9% con tendencia decreciente hasta 1,2% (2022), Ecuador aumentaba a 3% (2009-13), manteniendo inversión en 2,62% para años 2007-22. Colombia, de 1992 a 1996, enfrentado a grupos armados, amplio de 2,1% a 4,4%; Perú usaba 2,6% cuando aún nos defendíamos de la violencia terrorista. En el siglo XXI ellos invirtieron por encima del 3% del PBI, Perú solo 1,3%.
Chile rara vez invirtió menos PBI que Perú: Frei con 2,6% ante primer gobierno de Belaunde a 3,3%. Ni en la década 1970 - 80 la media fue menor: gobiernos de Allende con 5,9% y Pinochet con 6,6%, frente a Velasco con 4% y Morales Bermudez con 5,6%. Este siglo Chile promedia 2,21%, superándonos en 0,91%.
La Defensa Nacional es el bien público por excelencia. Asignar recursos, adquiriendo sistemas de armas, impulsando cadena de desarrollo tecnológico, motivando necesidad por profesionales, técnicos y empresarios, impulsando escuelas y centros de investigación, proyectando nuestra presencia internacional, dotando al Perú de sustantiva mejora en su peso estratégico, es la forma como desde el poder militar se contribuye a satisfacer las necesidades e intereses de los peruanos. Político responsable: aprende, enseña y lidera, que un país justo es tener un Estado eficiente dando seguridad, educación, salud, defensa, desarrollo y bienestar a su población, sin falsas contradicciones.
