Lo dicho por Vladimir Cerrón en la noche del miércoles último a Canal N, en el sentido de que su grupo político tiene un “Plan B” en caso no logren aterrizar el mamarracho de proyecto de ley que han presentado para imponernos una asamblea constituyente para sacar una Carta Magna como la de Venezuela o Cuba, deja en claro que los comunistas que están en el gobierno van por el Congreso, al cual pretenden cerrar a como dé lugar.
Días atrás en Correo Lima dimos una portada que decía “Plan siniestro”, en la cual afirmábamos que una vez que la propuesta del referéndum para la asamblea constituyente sea rechazada por el Congreso por ser absolutamente ilegal, el gobierno de Pedro Castillo, su socio Cerrón y su premier Aníbal Torres acusarían al Poder Legislativo de oponerse a una nueva Carta Magna que según el discurso oficialista siempre mentiroso, sería la única capaz de traer la solución a todos los problema del país.
Con esto buscarán que el alicaído pero legítimo Congreso actual, sea aún más vapuleado por los peruanos, a fin de que cualquier propuesta de cierre sea algo “popular” y “bien visto” en las calles. El rechazo de la confianza a dos gabinetes impresentables les puede ser útil. Lo dijo Cerrón en la campaña electoral y ahora ha vuelto a mover el asunto, aunque sin dar mayores detalles. Solo indicó que el “Plan B” tiene que ver con el Poder Legislativo. No hay peor ciego que el que no quiere ver.
El Perú está siendo llevado de las narices hacia el abismo por un profesor de primaria filosenderista como Castillo, un corrupto como Cerrón, un personaje famoso por hablar disparates como el premier Torres, un procesado por terrorismo como Guillermo Bermejo, una bancada parlamentaria integrada por docentes desaprobados en sus elementales evaluaciones y el apoyo de una izquierda chavista que se quedó en los años 70 y solo quiere su chambita en el Estado.
Si algo de “bueno” tiene Cerrón es que a diferencia de Castillo –que no habla claro ni cuando lee, no sabe dónde está parado y miente con total desparpajo–, el sentenciado por corrupción al menos sí posee un plan y no tiene reparos en hacerlo público. Por eso, lo que se le viene al país al estar en manos de esta gente, no puede ser nada bueno. Si no les sale su adefesio de Constitución, que nos les va a salir, tratarán de traerse abajo al actual Poder Legislativo para buscar otro con mayoría. Advertidos estamos.