La reunión de Runasur convocada para el 20 y 21 de diciembre, ha sido suspendida, por la oposición mediante un comunicado de 3 excancilleres y 8 exviceministros de Relaciones Exteriores, así como por la declaratoria de persona no grata de Evo Morales por una comisión del Congreso, en curiosa coincidencia con los anteriormente mencionados.

La Unasur (Unión de Naciones de América del Sur) como “organismo de integración plurinacional” formada el 2008, entra en vigencia el 2011 integrada por Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela. Los gobiernos de Argentina Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú suspendieron su participación el 2018, más interesados en la política norteamericana.

El ejercicio democrático se basa en la pluralidad de ideas y propuestas políticas. Es un derecho el ejercicio de reunión y ampararse en haber asumidos anteriormente cargos públicos, no justifica la intolerancia ni las medias verdades.

El comunicado en mención sostiene que la soberanía del Perú estaría en riesgo porque la reunión de Runasur respaldaría la aspiración de Bolivia a tener un acceso soberano al mar o porque el reconocimiento de países plurinacional podría llevarnos a una remota desintegración.

¿Olvidan acaso que el Perú respalda desde hace años la aspiración boliviana de acceso al mar?, ¿pretenden negar que la Constitución Política en su artículo 48° reconoce como idioma oficial el castellano, también el quechua, aimara y demás lenguas aborígenes y por lo tanto la diversidad cultural y étnica?

Este comunicado expresa una posición política abiertamente antidemocrática, discriminadora y racista, más aún cuando en otras ocasiones han recibido con los brazos abiertos a políticos opositores de gobiernos ideológicamente distantes.