Mientras el foco de atención de los peruanos es la incapacidad del Gobierno para resolver los problemas de la gente, los escándalos del Congreso y la pésima campaña de la selección peruana. ha pasado desapercibida la marcha a pie de un numeroso grupo de alcaldes provinciales, distritales y centros poblados, además de población en general, desde Ayacucho a Lima.
Esta manifestación pacífica, liderada por la Asociación de Municipalidades del Perú (AMPE), no solo es una expresión de descontento, sino también un llamado urgente para que el gobierno central reconozca y priorice las necesidades de las municipalidades de distritos y provincias. A pesar de contar con la unidad ejecutora de estos proyectos, el gobierno ha dejado en el olvido a muchas comunidades locales, que a su vez enfrentan serias crisis económicas y se ven en la difícil posición de depender de la buena voluntad de los ministerios.
Es cierto que hay cuestionamientos a este evento , principalmente por la poca ejecución de gastos que tienen las municipalidades. En tanto, otros critican porque piden más presupuesto y no tienen un plan de inversiones bien estructurado. Sin embargo, la marcha de los alcaldes no se limita a las protestas, esta medida se asume como la oportunidad para presentar propuestas como el proyecto para duplicar Fondo de Compensación Municipal (Foncomun).
Los burgomaestres llegarán a Lima el 26 de octubre y esperan reunirse con la presidenta Dina Boluarte para abordar las soluciones de los problemas por la falta de recursos y así cerrar las brechas en los servicios de agua, infraestructura vial, educación y salud en los mil 800 distritos del país.