Siete personas murieron cuando varios insurgentes armados con rifles de asalto y granadas propulsadas por cohetes atacaron una estación en Peshawar, en el noroeste de Pakistán.
La policía informó que los atacantes mataron a dos personas en la planta de electricidad, sabotearon el equipo y huyeron con nueve rehenes.
El portavoz de la policía, Granullah Khan, indicó que los individuos posteriormente dispararon contra cinco de los rehenes y escaparon con los otros cuatro.
Los daños a la estación eléctrica condujeron a apagones en algunas partes de la ciudad.