GF Default - Imported ANS Video id=8fad72e5-655c-428e-943a-9ce73bbf09d3
GF Default - Imported ANS Video id=8fad72e5-655c-428e-943a-9ce73bbf09d3

Han pasado diecisiete años de la terrible tragedia desatada un 14 de agosto de 1996, donde 35 personas perdieron la vida luego que una esquirla impactara contra un cable de alta tensión.

Despues de 17 años, que han pasado casi al olvido, una humilde mujer recuerda lo ocurrido en esa trágica noche de agosto sobre el Puente Grau. Rufina Mamani Chalco, comerciante lleva en su memoria lo vivido junto a sus hijos.

Ella se encontraba vendiendo pan a la altura de la Clínica Arequipa, y para terminar pronto la venta dejó a sus dos menores hijos en el cruce del puente, vendiendo algunas golosinas.

Las horas trascurrían y las personas se preparaban a entonar el himno de Arequipa, cuando de pronto una de las bombardas encendidas curso camino errado y fue a descargar su chispa sobre los cables de alta tensión.

Todo fue rápido- explica- luego que empezaran a reventar los fuegos artificiales, comenzó a sentise, minutos después, un olor a carne y cabello quemado.

Y derepente, todo el mundo corría de un lado para el otro. Los bomberos empezaron a llegar ya no se permitía pasar por el puente. Luego que trasncurriera todo, ella a fin pudo reunirse y abrazar a sus hijos.

Años después, las personas que perdieron a su ser querido dejaban sus ofrendas florales en el puente Grau. Pero actualmente, los arreglos fueron desapareciendo, revela Rufina Mamani.

TAGS RELACIONADOS