Faltan valores en la sociedad

SABANDÍA. Las escenas son repetidas (nada nuevo en realidad), pero reflejan el fondo mismo del problema: la corrupción.

Escena 1: Ayer, fui a un céntrico restaurante, a una mesa cercana a la mía, llegó una agraciada joven, unos 28 años. Le entrega al mozo un billete de 20 nuevos soles. Le pide un menú de 6.50 nuevos soles. Recibe su vuelto. Le solicita (baja el tono de su voz), "por favor, necesito una boletita por 15 soles". El mozo le responde: "hable con caja". Se aleja raudo.

Escena 2: El taxista comete una infracción, (se pasa la luz roja). Rápido saca su brevete. Debajo, esconde un billete de 10 soles. "Jefe, disculpe, no va a volver a pasar...", ¡Cómo que no, Ud. sabe que se ha pasado una luz roja, y tendrá una multa de 426 nuevos soles!. "Pero, jefecito", le alcanza su brevete y la pequeña coima. El policía reitera: "Ud. Debe ser sancionado...". Hace como que mira el brevete y más raudo todavía se guarda el billete. "Para otra vez, tenga más cuidado". Se aleja dizque a seguir ordenando el tránsito vehicular. La corrupción sigue en acción.

SEGÚN LA RAE. El diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, señala textualmente que corrupción significa: "En las organizaciones, especialmente en las públicas, práctica consistente en la utilización de las funciones y medios de aquellas en provecho, económico o de otra índole, de sus gestores".
Estimado lector(ra), las dos escenas retratadas líneas arriba, son bastante comunes, tan comunes que casi son parte de "nuestra cotidiana realidad, y que al final son la verdadera corrupción que destruye el sistema", explica el integrante del Programa Umbral Anticorrupción, doctor Raúl Callirgos Velarde.
Abundando en explicaciones, sostiene que "el problema de fondo, son la ausencia de valores. Si una persona, un funcionario, un juez, un ciudadano, etcétera, no tiene bien cimentandos estos, cualquier pequeño acto de corrupción (por más mínimo que sea) será casi normal", agrega con evidente alarma.
Estas explicaciones las hizo en el marco del evento Diálogos de la Oficina de Control de la Magistratura, apoyado por la agencia USAID de los Estados Unidos, ayer desde las 09:00 horas, en el hotel El Lago en Sabandía.

CORRUPCIÓN GRANDE. El especialista, al ampliar los conceptos, sostuvo que los "grandes actos de corrupción, tienen una exposición mediática en los medios de comunicación y deben ser severamente sancionados. Sin embargo, el verdadero problema, son estos pequeños actos de corrupción: la coima a un policía, que aumenten el precio en el vale de consumo, el adquirir un CD pirata, son los detalles que tenemos que tomar en cuenta, y debemos desterrar porque son los que se van cimentando en la sociedad, como si fueran lo más normal del mundo", explica Raúl Callirgos.

PROGRAMA. En el mismo evento, al que asistieron una serie de representantes de diversas instituciones públicas y privadas, también expuso el jefe de la ODECMA, doctor Benito Paredes, así como el juez superior, asistente de la OCMA, Martín Hurtado Reyes.
En conclusión, la corrupción al menos en nuestro país, es la suma de pequeñísimos actos cotidianos. ¿El problema, es hasta cuándo...?