Fenómeno El Niño: Lucha sin cuartel contra roedores e insectos
Fenómeno El Niño: Lucha sin cuartel contra roedores e insectos

El , que ha generado sequías y lluvias en distintas regiones del país, se ha manifestado también en Lima con un incremento en las temperaturas promedio del verano. Aunque con frecuencia se habla de los riesgos que esa condición climática genera en la piel, existen otros peligros asociados que han pasado casi desapercibidos.

En agosto pasado, el  alertó que “la variabilidad ecológica” favorecería la reproducción de mosquitos vectores, roedores y bichos, escenario que no ha sido ajeno a la capital.

Algunos distritos, sobre todo los que tienen más áreas verdes, fueron especialmente vulnerables a la aparición de dichos animales.

Correo consultó a algunas de las comunas con mayor extensión de esos espacios y cinco confirmaron que la advertencia del Minsa se cumplió.

Tendencia. San Isidro tiene 18.2 metros cuadrados de áreas verdes por habitante y es uno de los que lidera el ranking en este ámbito. Aunque la comuna tenía programadas 24 campañas de fumigación para este año, en lo que va del verano se han tenido que realizar más de 100 intervenciones extraordinarias ante las alarmas de los vecinos.

Dicha cifra es 10% mayor al promedio histórico para esta temporada. “Se ha registrado un aumento en la presencia de fauna nociva”, por lo que cada mes se colocan más de 2000 cebos raticidas en las redes de alcantarillado, detalló la comuna.

El panorama también preocupa en La Molina. Juan Carlos Zurek, alcalde del distrito, indicó que, en condiciones normales, su municipalidad destina S/80 mil a los procesos de fumigación y desratización. Este año, ese presupuesto creció hasta S/200 mil por la demanda adicional de insumos, equipos y capacitación de cuadrillas.

Durante 2016, dice Zurek, se intervinieron 1200 puntos con raticidas y más de 400 mil metros cuadrados de áreas verdes públicas. El municipio ha planteado estrategias complementarias para el control de plagas, entre ellas la implementación de riego tecnificado, el cierre de sus puntos de acopio de maleza y la ampliación de los servicios de limpieza.

La Municipalidad de Jesús María también reconoce una tendencia alarmante. Salvador Sequel, coordinador de la Subgerencia de Sanidad, indicó que aún no se ha cuantificado el impacto de El Niño, pero añadió que “definitivamente aumentó la cantidad de intervenciones que realizamos en verano”.

En este distrito, dijo Sequel, el Minsa ha detectado cuatro sectores con presencia del mosquito Aedes aegypti, responsable de transmitir enfermedades como el dengue, la malaria y la chikungunya.

Ante la alerta verde que emitió ese portafolio, la comuna tuvo que reforzar sus campañas de fumigación en parques, canales de riego y en zonas residenciales.

Otros casos. En Surco, aunque la comuna reconoce que la presencia de roedores es habitual, su problema se ha presentado por el incremento de parásitos como pulgas y garrapatas. Ana Mendoza, gerente de Servicios a la Ciudad, dijo a Correo que la fumigación se realiza, usualmente, cada 15 o 30 días según la zona. No obstante, este verano las intervenciones se ejecutan cada semana.

Según Mendoza, la presencia de roedores se produce, en gran medida, por los malos hábitos vecinales en la gestión de residuos sólidos, pues el calor y la basura propician su proliferación.

Alejandro Hesse, gerente de Medio Ambiente de la Municipalidad de San Borja, confirmó que en su jurisdicción también se ha registrado una aceleración en el ciclo de reproducción de roedores y mosquitos.

Agregó que se tienen programadas dos campañas de desratización al año, pero que la fumigación ha sido asumida por el Minsa.

En el caso de Miraflores, el control de plagas ha sido tercerizado a una empresa que, además, se encarga de mantener el 65% de las áreas verdes del distrito.

Como aporte particular, dicho municipio tiene un insectario que utiliza para combatir la presencia de insectos predadores (chinche succionador de gusanos, crisopas, mariquitas) y parasitoides (microavispas). Desde su puesta en operación en 2007, ha liberado más de 600 mil insectos y logró reducir en 60% el uso de insecticidas.

En todos los casos, las autoridades apuestan por utilizar productos biológicos que eviten el riesgo de daños colaterales en niños o mascotas. Los retos que impone la naturaleza, al parecer, se combaten también con su propia sabiduría.

Peligro

Enfermedades pueden atacar

Los roedores son peligrosos no solo por las enfermedades que transmiten a través de las mordeduras, sino también por aquellos males que se pueden contraer al estar expuesto a sus excretas.

Uno de los males más conocidos es el hantavirus, agente que vive en la orina, saliva y excremento de las ratas.

Usualmente estos elementos se mezclan con el aire a través del polvo.

Los síntomas iniciales, según sitios médicos especializados, son fiebre, dolor muscular, dificultad para respirar y acumulación de fluidos en los pulmones.