La rotura de una tubería en la avenida Santa Rosa, en el distrito de San Juan de Lurigancho —el más poblado de la capital—, provocó la inundación de un par de colegios, unas cinco viviendas y dos negocios ubicados entre las calles El Milagro y El Rosario.
Según testimonio de los vecinos, el incidente se produjo a las 4 horas de la madrugada; y pese a las reiterativas llamadas a Sedapal, los trabajadores de esta institución recién llegaron a las 7:00 de la mañana a subsanar el problema.
Patricia Berrocal, dueña del nido Summerhill School, indicó que se vio obligada a suspender las clases debido a que todas las instalaciones se encontraban llenas de agua.
"Hemos perdido material educativo y recreativos. No es la primera vez que ocurre. Son ya tres veces que debemos lidiar con inundaciones", contó, no sin cierta indignación, la señora Berrocal.
Junto a esta institución, el colegio Trilce, un restaurante, una empresa de maquinaria y cinco casas quedaron igualmente dañadas