A casi un año y medio de que terminara su gestión, María Jara Risco fue retirada -por decisión del Gobierno- de la presidencia del Consejo Directivo de la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU).
La hasta ayer jefa de la entidad había sido designada en el cargo en octubre del 2019 para cumplir un periodo de cinco años, de acuerdo a lo establecido en la norma inicialmente.
No obstante, esta semana el Poder Ejecutivo modificó, a través de un decreto supremo, el reglamento del citado organismo para añadir una nueva causal que permita la remoción de los miembros titulares de la ATU. El solo anuncio del cambio generó una gran polémica.
Este cambio, que tendría matiz político, según expertos, ocurre en medio de las diferencias de la entidad con la gestión de la presidenta Dina Boluarte y la discusión por parte de autoridades sobre la formalización y el empadronamiento de taxis colectivos en la capital (ver infografía).
REMOCIÓN. Mediante la resolución suprema No. 009-2023-MTC, el Gobierno dio por concluida la designación de María Jara como miembro y presidenta del Consejo Directivo de la ATU.
En el documento se hace mención al nuevo criterio añadido por el Ejecutivo para el retiro de los miembros del referido consejo: la pérdida de la confianza de la autoridad proponente.
El miércoles 10 de mayo, el Consejo de Ministros aprobó un decreto supremo que modificaba el reglamento y la organización de funciones de la ATU, organismo encargado de organizar, implementar y gestionar el Sistema Integrado de Transporte de Lima y Callao.
El cambio se oficializó al día siguiente con la publicación de un decreto supremo firmado por Boluarte y la ministra de Transportes y Comunicaciones, Paola Lazarte.
Es preciso señalar que el Consejo Directivo de la ATU lo conforman ocho miembros por un periodo de cinco años. Así se decidió desde la creación del organismo, el 8 de diciembre de 2018, durante el gobierno de Martín Vizcarra.
Una eventual remoción estaba contemplada en escenarios como fallecimiento, incapacidad permanente, renuncia aceptada, impedimento legal sobreviniente a la designación, por falta grave, inasistencia injustificada a tres sesiones consecutivas o cinco no consecutivas del Consejo Directivo en el periodo de un año, salvo licencia autorizada.
No obstante, con los cambios hechos por el gobierno, el MTC podrá decidir qué funcionario de confianza entra o sale de la ATU.
María Jara Risco fue designada como cabeza de la ATU el 16 de octubre del 2019 por cinco años. La resolución de su nombramiento también fue suscrita por Vizcarra y el titular del MTC, Edmer Trujillo.
En las últimas semanas, salieron a la luz diferencias entre la ATU y las decisiones emprendidas por el sector Transportes, sobre todo en relación de la gestión de tarjetas de la Línea 2 del Metro de Lima. Sobre este tema, Jara señaló a la titular del sector, Paola Lazarte, que no tenía la obligación contractual para la compra de tarjetas, además de no contar con el presupuesto debido. Lazarte envió un escrito a Jara cuestionando la respuesta ofrecida por el organismo.
A este escenario se le sumó el debate, tras iniciativas del alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, y una propuesta de ley de Perú Libre, de formalizar a los taxis colectivos en la capital. Dicha iniciativa fue criticada desde la ATU debido al trabajo que se realiza para priorizar e implementar un adecuado transporte público en la ciudad.
Cabe recordar que a fines de 2021, Jara Risco enfrentó presiones de gremios de transportistas para que sea retirada del cargo luego de que el entonces titular del MTC, Juan Silva, la cuestionara en una actividad pública.
El hecho ocurrió en noviembre cuando Silva realizaba un balance de su gestión. En dicho evento, el ahora prófugo anunció la reorganización del referido organismo y dejó abierta la posibilidad de la salida de Jara del cargo ante los gremios de transportistas.
REEMPLAZO. Ante la remoción de Jara, el Gobierno designó a José Aguilar Reátegui presidente de la ATU. De acuerdo a su hoja de vida, es economista experto en políticas públicas y regulación en servicios del Estado, pero con poca experiencia en el sector transportes.
Aguilar se ha desempeñado como director general de la Dirección General de Políticas y Regulación en Transporte Multimodal del MTC y director general de la Dirección General de Políticas y Regulación en Comunicaciones de la misma cartera. Fue jefe del Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (OSITRAN) y servidor civil del Organismo Supervisor de la Inversión Privada en Telecomunicaciones (OSIPTEL).
DISCREPAN. Sobre la salida de Jara, Alonso Florez, gerente general de la Fundación Transitemos, dijo que el hecho fue una cuestión meramente política.
“Hasta ahora no expresan una causal justificada. Simplemente hablan de cuestión de confianza y este no es un cargo de confianza. Acá metemos la política en una decisión técnica”, dijo.
Agregó que “fue una intromisión del Ejecutivo” y que todo respondía a pura “demagogia”. Indicó que Jorge Aguilar, el reemplazo de Jara, es una persona con frondosa experiencia en otros temas que no tienen nada que ver con el transporte público.
“El tema acá es que no se respeta la institucionalidad. Ella tenía que cumplir su mandato, pero no fue así. Esto es un atentado a la institucionalidad”, añadió.
No obstante, esta opinión no la compartió Luis Quispe Candía. El experto refirió que hubo desde hace un tiempo un conflicto interno en el MTC y que desde que Jara entró a la ATU no ha cambiado absolutamente nada en el sector Transporte.
“La ATU es del Ejecutivo, ahí no hay ninguna intromisión sino una descoordinación”, dijo al ser consultado sobre el tema en cuestión.