El contralor de la República, Édgar Alarcón, habló claro y su mensaje iba directo a Palacio. “Yo creo que es oportuno, en el caso de la IIRSA Sur (Carretera Interoceánica), revisar y replantear el contrato, ver una posible modificación y mejorar las condiciones para el país. El contrato no está escrito sobre piedra”, dijo enfáticamente.
Por esta obra, según la investigación fiscal y declaración de los testigos, el expresidente Alejandro Toledo recibió $20 millones de coima, a fin de favorecer a las empresas brasileñas encabezadas por Odebrecht con la adjudicación.
En ese sentido, el contralor Alarcón indicó que el incremento en los precios ha sido una constante en los tramos 2, 3 y 4 de la Interoceánica, ya sea por adendas, arbitrajes o por obras adicionales y complementarias. Esto hizo que la obra llegue a costar $4141 millones hasta el momento, a pesar de que estaba proyectada a $1161 millones, es decir un 257% de incremento.
La preocupación que señala el Contralor es que este incremento, proyectado a los 14 años que falta de concesión, sea aún mayor en $521 millones adicionales, con lo cual la obra alcanzaría un valor de $4668 millones.
PPK y adendas. Según explicación detallada de las irregularidades encontradas por la Contraloría en este megaproyecto, Alarcón indica que fueron 13 adendas las que firmó el presidente Toledo hasta un día antes de terminar su mandato.
Este paquete de adendas contó con la autorización y conocimiento del actual mandatario Pedro Pablo Kuczynski, en su calidad de presidente del Consejo de Ministros de la época. Cabe recordar también que, en aquel momento, el ministro de Economía era el actual premier Fernando Zavala.
“En todos los gobiernos se han firmado adendas, pero específicamente (las 13 que generaron sobrecostos) han sido en el gobierno del señor Toledo”, destacó Alarcón.
Señaló, además, que en el 2011 la Contraloría advirtió sobre las irregularidades encontradas al Ministerio de Transportes y Comunicaciones, ProInversión y Ositran, pero no pasó nada.
Las brasileñas que se beneficiaron con estos incrementos en los tramos señalados fueron Norberto Odebrecht S.A., Andrade Gutiérrez, Camargo Correa S.A. y Constructora Queiroz Galvao S.A. Todas ellas se encuentran investigadas por actos de corrupción.
CALIDAD. Pero no solo el incremento de los costos ha sido la única irregularidad que encontró la Contraloría hasta el momento.
Halló deficiencias constructivas en el Tramo 3, trabajos deficientes en alcantarillas, pavimento asfáltico con espesor inferior al ofertado, fisuras en los elementos estructurales de dos puentes. Esto afecta la durabilidad de la obra.
Asimismo notaron que en la distribución de riesgos de construcción, financiamiento y medioambientales, la mayor carga la tiene el Estado peruano.
“Si ambas partes nos ponemos de acuerdo y analizamos las condiciones en que está en este caso Odebrecht en nuestro país, siendo investigado, yo creo que sí podríamos llegar a revisar y replantear el contrato en lo que queda de concesión. Son más de $500 millones”, dijo Alarcón.
Dato. 257% fue el incremento de la IIRSA en comparación a la inversión inicial.
Candado. Cláusula anticorrupción debe ser total. Édgar Alarcón destacó la necesidad de incluir una cláusula anticorrupción que tenga un carácter general para todos los contratos de una empresa o consorcio en el país.
“No una cláusula específica para la obra que viene realizando. Si detectamos que la empresa o consorcio tiene la obra A, pero realiza actos de corrupción en una obra B, también debe estar sujeta a una posible resolución de contrato”, sostuvo.
Olvidos. El exlegislador Alejandro Aguinaga sostiene que Pedro Cateriano “olvida o quiere hacernos olvidar” que fue el viceministro de Fernando Olivera cuando impuso a la Contraloría luz verde para Interoceánica.