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Daniel Vignali, profesor adjunto de Derecho Internacional y decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas de Universidad de la Empresa (UDE) de Uruguay, aseguró que el Gobierno de su país “se compró un problema” con el pedido de asilo del expresidente , conocido días atrás.

La situación de Uruguay, sea otorgando o no el asilo, va a tener una repercusión internacional sin lugar a dudas. La verdad es que nos compramos un problema”, sostuvo en diálogo con Correo, tras señalar que dicha solicitud no estaba prevista de modo alguno.

"Si dicen que sí al pedido de Alan García, vamos a tener problemas con Perú, es evidente desde el punto político. Y si dicen que no, ¿se imaginan la imagen de García retirándose de la embajada frente a toda la prensa internacional mirando? El que queda mal es nuestro país", recalcó.

ESCENARIO. Asimismo, manifestó que, de concederse el asilo diplomático a García, el Perú "está obligado" a otorgar el salvoconducto y -bajo ese escenario -podría contemplar el inicio de un proceso de extradición ante las autoridades pertinentes dentro de un plazo de 30 días.

"(Perú) tiene una herramienta que es comunicar al Estado uruguayo que le da el salvoconducto, pero que va a pedir la extradición de Alan García. En este caso hipotético, Uruguay está obligado a traer a Alan García a nuestro país y mantenerlo aquí por 30 días a la espera del pedido de extradición. Si llega el pedido de extradición de la justicia peruana, hay otro órgano jurisdiccional uruguayo que analizará el expediente. Y ese (proceso) es más complicado", sostuvo. 

El catedrático aseguró que no existe un plazo para que Uruguay se pronuncie sobre la solicitud del líder aprista, pues "se entiende que será resuelto en un plazo prudencial". Vignali precisó que si bien la Cancillería de su país evaluará los argumentos presentados por García y el Estado peruano, tendrá en cuenta aspectos políticos del caso.

"En nuestro país hay opiniones divergentes, gente que dice que hay que asilarlo por la tradición que tiene Uruguay; y otros que dicen que no corresponde el asilo al señalar que no existe persecución política y que los delitos que se le acusan no son políticos. (...) Para nosotros los abogados la verdad está en el expediente. La información que tiene Uruguay es de parte del propio Alan García y del Estado peruano", manifestó.

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