La Defensoría del Pueblo, ahora bajo la dirección de Josué Gutiérrez Cóndor, intervino indebidamente en favor de Nadine Heredia Alarcón en un asunto judicial a cargo de la Segunda Sala Penal de Apelaciones Nacional.
Tal involucramiento inédito de la Defensoría en favor de una procesada, ocurrió con la máxima discreción; no fue hecho público y más bien mantenido bajo reserva.
El suceso fue conocido en las últimas horas en el contexto de la resolución de la Segunda Sala Penal de Apelaciones Nacional.
El fallo revocó el impedimento de salida del país de Heredia, y le autoriza viajar a Colombia por razones justificadas de salud.
La Sala refiere el incidente en un apartado de la resolución, en un evidente tono de cuestionamiento.
NO FACULTADA
“Si bien la Defensoría del Pueblo tiene, dentro de sus prerrogativas, el deber de velar por los derechos constitucionales y fundamentales de la persona y la comunidad, no obstante, cabe precisar que tales facultades no le permiten sugerir a los órganos jurisdiccionales, interpretaciones de las normas que componen nuestro ordenamiento jurídico (...)”, dice el texto.
Prosigue su emplazamiento a la conducta de la Defensoría: “Tratándose de procesos judiciales, esta es una tarea exclusiva de la función jurisdiccional”.
Añade: “Sin perjuicio de lo expuesto, debemos indicar que la controversia jurídica que dio motivo a la comunicación (escrito de Defensoaría) ha sido resuelta conforme a derecho según se puede apreciar de los fundamentos expuestos en la presente resolución” precisa la Sala superior.
Los antecedentes partidarios del Defensor son harto conocidas: una constante defensa parlamentaria de la investigada Nadine Heredia, Ollanta Humala, Pedro Castillo y Vladimir Cerrón, entre otros.
Omar Chehade comentó: “Si eligen a una persona que es alfil de Nadine Heredia, de Ollanta Humala, de Vladimir
Cerrón, pues ¿qué se puede esperar de alguien así?”.
