Alejandro Toledo: Juez ordena la búsqueda y captura internacional de exmandatario

El Poder Judicial ordenó ayer la búsqueda y captura internacional del expresidente Alejandro Toledo, a fin de que sea traído al Perú y cumpla con los 18 meses de prisión preventiva por haber recibido, presuntamente, coimas de la empresa Odebrecht, tras aceptar el pedido fiscal.

“Este despacho considera que es necesario imponerle prisión preventiva”, concluyó el juez.

De esta forma, determinó que Toledo Manrique debe ser recluido en un penal de la capital.

El juez no aceptó el pedido de la defensa de Toledo, que solicitaba una prisión domiciliaria.

Queda en la memoria popular aquel político que se decía ser el último heredero de la Incas y quien con vincha en mano invocó a los Cuatro Suyos para emprender la marcha contra la corrupción en los estertores del gobierno de Alberto Fujimori.

De acuerdo con los argumentos que utilizó el Poder Judicial para dictar la orden de prisión preventiva, Toledo Manrique habría usado su condición de Presidente de la República para beneficiar a Odebrecht, en la licitación de los tramos 2 y 3 de la Carretera Interoceánica. Todo ello a cambio de dádivas.

“El investigado Alejandro Toledo, con actos específicos, habría sentado las bases para el favorecimiento al consorcio que ganó la obra Interoceánica dentro de los cuales estaba la empresa Odebrecht”.

EL HOMBRE DE ATRÁS. Horas antes de esta trascendental decisión, el Ministerio Público sustentó los cargos contra Toledo Manrique, basándose en diversas pruebas indiciarias. Primero, las declaraciones del colaborador eficaz Jorge Barata, quien ha pedido ser identificado con nombre y apellido.

“Ama sua, no seas ladrón”, fue el mensaje que el fiscal anticorrupción Hamilton Castro envió a Toledo, quien pasó a convertirse en prófugo de la justicia.

En sus declaraciones, Barata afirmó que fue Toledo -en 2004 en un hotel de Brasil- quien le solicitó dinero a cambio de ayudarlo porque él quería que Odebrecht ganara la licitación de la carretera Interoceánica.

“Toledo ofreció al señor Barata, representante de Odebrecht, ejercer influencias en el comité de ProInversión. Esto fue, no variar los plazos del cronograma del proceso, no se posterguen e impedir la participación de otras empresas”, argumentó el fiscal.

Para ello, indicó Castro, “Toledo instruyó a Barata para que los pagos sean hechos en tres empresas identificadas y ligadas a Josef Maiman”, amigo de Toledo desde hace 40 años.

Así, el fiscal indicó que Maiman fue el testaferro de Toledo, pues usó sus empresas offshore (Trailbridge LTD, Warbury and CO. y Merhav Overseas Limited) para receptar los pagos que realizó Odebrecht. Fueron 18 las transacciones identificadas hasta el momento con un total de 9’626,010.00 dólares.

“Toledo es el hombre de atrás. Es el hombre detrás de las cuentas de Josef Maiman, no vengan a pedirnos, como se ha señalado en su momento, que identifiquemos las cuentas de Toledo. No hay, no funciona así este esquema”, declaró.

INFINIDAD DE PRUEBAS. Esta tesis fiscal fue admitida por el juez Concepción Carhuancho, quien sentenció: “Alejandro Toledo estaba vendiendo la obra Interoceánica a cambio de dinero”.

Para el juez, una de las piezas claves es la vinculación de Josef Maiman con las empresas Trailbridge LTD ( depósito de 750 mil dólares) y Merhav (depósito de 2’950,000 dólares).

“Más de tres millones de dólares. Esto no descarta que hallan otros pagos que podrían ser identificados y, por tanto, es un elemento que demostraría que Toledo usó las cuentas de Josef Maiman”, reafirmó.

El magistrado decretó que “existe un alto grado de probabilidad de que Alejandro Toledo haya sostenido un acuerdo ilícito con Simoes Barata para favorecerlo con la concesión de la Interoceánica”.

Para respaldar esta hipótesis, el juez citó el acuerdo suscrito entre el Departamento de Justicia de Estados Unidos y Odebrecht.

También tomó en cuenta la declaración de Barata, la que a consideración del juez, se trata de una versión creíble, acreditable y sostenible.

Como se recuerda, Barata relató que fueron 35 millones de dólares la cifra que le solicitó Toledo en Brasil.

Luego, el brasileño relató que hubo otros encuentros con Josef Maiman y Toledo en Barranco. “Fue en una casa, en segundo piso, con vista al mar, había un sofá grande”, detalló Barata. Además, dijo, otras reuniones fueron en el Grupo Merhav Perú, en San Isidro.

El pago, narró Barata, se trata de dinero no contabilizado, es decir que estaban en cuentas offshore y se pagaron con transferencias a las cuentas de Maiman. “Se hicieron contratos ficticios y puedo afirmar que alguno de los pagos se hicieron con dinero de la empresa”, acotó Barata.

A juicio del juez, esto representa un elemento de convicción. “Estaban los funcionarios de Maiman para coordinar cómo se iban a justificar los desembolsos por parte de Odebrecht. El núcleo era que Alejandro Toledo Manrique, expresidente de la República, no iba a recibir el dinero en sus cuentas, sino que sería a través de su amigo Josef Maiman”, dijo el magistrado.

A ello se suman los récord migratorios de Toledo y Barata. Ambos salieron rumbo a Brasil (Río de Janeiro) el 3 de noviembre y retornan el 5 de noviembre del 2004.

DELITOS VERIFICADOS. El juez resolvió que el delito de tráfico de influencia imputado a Toledo se identifica porque este vendió sus influencias para favorecer a Odebrecht, mientras que el de lavado de activos “lo identifica de manera concreta y visible en un acto de transformación de activos que fue depositado en Trailbridge LTD (750 mil dólares), del cual salen 550 mil dólares hacia una empresa de Merhav Israel, de Josef Maiman”.

Además, diferenció el delito de lavado de activos en el caso Odebrecht de la investigación que se lleva en el caso Ecoteva.

Sobre la presunción de inocencia, el juez considera que basta jurisprudencia ha determinado que “no se exige certeza sobre los hechos que está imputando el Ministerio Público contra Alejandro Toledo. Solo la ocurrencia de un alto grado de probabilidad”.

“La presunción de inocencia no es absoluta, es relativa (...) La propia Corte Interamericana exige que existan indicios suficientes. En esta audiencia hemos dado pluralidad de indicios”, anotó.

Concepción Carhuancho puso énfasis en que “Toledo causó un grave perjuicio al Estado, al vender la obra Interoceánica”.

También rechazó las recientes declaraciones de Toledo, quien adelantó que solo se someterá “a una justicia justa”. Concepción dijo que el expresidente “está buscando una justicia a su medida y ¡no hay justicia a la medida de nadie!”.

“Le recuerdo al investigado que él fue una de las personas que posibilitó que el Estado retorne al Estado democrático. Si bien él fue Presidente, es un ciudadano que se debe someter a la ley”, concluyó.