La Dirección de Investigación Criminal (Dirincri), continuará hoy con la reconstrucción del crimen del periodista José Yactayo Rodríguez (56).
08:04 Wilfredo Zamora fue sacado de la sede de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri), en el Cercado de Lima, con un chaleco antibalas y en medio de un fuerte contingente policial conformado por más de 30 policías y un representante del Ministerio Público con destino a Breña.
08:20 El estudiante de Mecatrónica llegó hasta el jirón Aguarico donde contó que en esa zona dejó varias bolsas, zapatillas y ropa de José Yactayo, así como algunas herramientas que utilizó para descuartizarlo. En un momento aceptó que en un inicio de la diligencia dijo que había estrangulado al periodista, pero mencionó que fue una confusión por la presencia de varios efectivos de la PNP, cuando en verdad quiso decir "descuartizó".
09:02 Zamora fue subido a un auto Volkswagen, color plateado, donde habría transportado los restos de José Yactayo, con destino a Huaura que como se recuerda fue hallado parte del cuerpo quemado. En un momento de la diligencia, negó que su pareja Aldo Caceda haya participado del crimen del periodista.
12:00 El presunto asesino llegó a Huaura para revelar el lugar donde quemó parte de los restos de José Yactayo. Durante la diligencia primero se dirigió a una zona donde dijo prendió fuego a parte del cuerpo, versión que luego fue cambiada debido a que los pobladores del lugar mencionaron que ese no era el sitio donde fueron halladas las partes del cuerpo del periodista.
ENCUENTRO. El primer punto de la diligencia fue la cuadra uno del jirón Castrovirreyna, en Breña, donde Zamora señala que conoció en persona a Yactayo, después de tres meses de haber entablado una relación amical a través de la red social para gays Manhut. El encuentro se dio el 25 de febrero, día en que desapareció el periodista, y una tercera persona se encargó de presentarlos.
“Junto a este contacto esperé a Yactayo en esta calle. Después que nos presentó, nos dimos la mano y lo invité a subir al auto (de propiedad de su pareja y tercer implicado en el crimen, Aldo Cáceda Benvenuto) para ir a mi departamento”, contó el detenido durante la diligencia.
Ambos se dirigieron a la habitación del estudiante de la UPC, ubicada en la calle Pedro Ruiz Nº 688 en la misma jurisdicción. En este lugar, al que el detenido fue trasladado por la Policía, bebieron licor y consumieron drogas hasta altas horas de la madruga.
Según Zamora, se quedó dormido por varias horas y al despertar, con síntomas de resaca, encontró muerto a Yactayo en un sillón. Aún así siguió durmiendo. Al mediodía del domingo 26 de febrero, volvió a ver la escena, entró en pánico y planeó descuartizar el cuerpo. Para esto, utilizó una sierra, un martillo y un cuchillo.
De acuerdo con la declaración del universitario, guardó los trozos del cadáver en su refrigeradora hasta el día siguiente, lunes 27 de febrero, en que los esparce por Lima.
TRAYECTO. La mañana de ese mismo día, se dirigió primero a la provincia de Huaura, en Lima, donde arrojó el torso y sus extremidades superiores en una chacra de Andahuasi, en el distrito de Sayán. Para ocultar su acción, los quemó. Sin embargo, por la tarde, un campesino encontró estos restos.
Los siguientes paraderos de Zamora fueron en diferentes distritos de Lima Metropolitana.
En el mismo auto, donde trasladó a Yactayo a su departamento, el joven se dirigió a la cuadra 8 de la avenida Riva Agüero, en San Miguel. Un tacho de basura, instalado en la vereda, fue el depósito ideal que encontró para deshacerse de una parte de las piernas, las cuales, según la Policía, dividió en tres y las puso en bolsas negras.
Indiferente, continuó su camino con rumbo al Callao. En el cruce de las avenidas Morales Duárez y Faucett, decidió arrojar la cabeza de la víctima al río Rímac. Después, se trasladó a la cuadra seis del jirón Andahuaylas, en el Centro de Lima, cerca del Congreso de la República, donde botó otras partes cercenadas en un contenedor de basura.
La diligencia culminó en el puente del Ejército, en Caquetá, ubicado también en el Cercado, donde el detenido sostuvo que tiró al río Rímac los demás restos que quedaban de ambas piernas de su víctima.
“(Este recorrido) lo hice solo”, reiteró en más de una oportunidad. Hoy continuará la reconstrucción a las 8:00 de la mañana en Huaura.
SIMILITUD. Como si se tratara de la misma historia, hace casi cinco años, el periodista Ricardo Vásquez Mori asesinó, descuartizó y colocó los restos de su pareja sentimental Enrique Armestar Anci en una maleta y lo abandonó por distintos puntos de la ciudad.
Ambas historias tienen un espeluznante símil. Los asesinos buscan minimizar su responsabilidad penal al argumentar en su defensa que las víctimas murieron antes de descuartizarlas.
“En ambos casos hay un móvil pasional, la forma de ocultar las pruebas, el desprecio por la vida y la estrategia de defensa que utiliza el asesino confeso (Wilfredo Zamora) para atenuar la crueldad con que actuó contra su víctima”, señaló el abogado José Ocampo Zumaeta, quien en su momento defendió a la familia de Armestar Anci.
Agregó que para desbaratar los argumentos del asesino confeso, la Policía debe recurrir al apoyo de los anatomopatólogos a fin de descubrir la forma en que murió (Yactayo). “También serán muy útiles las pruebas psicológicas y psiquiátricas para conocer la verdadera personalidad del asesino. Pareciera que este señor (Zamora) conoce el caso Armestar y quiere usar la misma estrategia del ‘Descuartizador de la maleta’”, concluyó.
CRONOLOGÍA
Así ocurrieron los hechos:
25 de febrero. José Yactayo salió de su casa de la cuadra 2 de la calle Vizcaya, La Victoria, con rumbo desconocido.
26 de febrero. Amigos y familiares del periodista reciben mensajes del WhatsApp de su celular. Detectan un lenguaje extraño.
27 de febrero. Hallan un cadáver calcinado en la comunidad de Andahuasi.
2 de marzo. Identifican cadáver de José Yactayo.
DATOS:
- 39 días después de ocurrido el crimen, capturan a Wilfredo Zamora Carrión.
- 5 horas duró ayer el recorrido de la reconstrucción del crimen de José Yactayo.