La devoción por la Virgen de las Mercedes es un acontecimiento deslumbrante que marca la vida espiritual de las gentes de la mayoría de países hispanoamericanos, como Cuba, México, Ecuador, Argentina y Bolivia.
Específicamente en el Perú, los actos festivos se remontan a los orígenes de la Colonia, desde los tiempos de la fundación de Lima, cuando los primeros padres mercedarios construyeron la primera iglesia conventual, que se construyó el 8 de setiembre de 1534, la misma que funcionó como la primera parroquia de Lima, hasta la construcción de la iglesia mayor en 1540. La entronización de la sagrada imagen en la Basílica de la Merced se realizó a comienzos del siglo XVII, como patrona de la ciudad de Lima.
Desde entonces, varias ciudades del Perú la tienen como patrona tutelar, por lo que podemos mencionar la siguiente relación de ciudades y regiones encomendadas a su protección espiritual:
Ciudad de Paita, en la región Piura.
Provincias de Carhuaz y Aija, y distrito de Yaután, en la región Áncash.
Pueblo de Collambay, distrito de Simbal, provincia de Trujillo; Chuquizongo, en el distrito de Usquil, provincia de Otusco, en la región La Libertad.
Chacomas, Santiago de Chuco.
Provincia de Juanjuí, en la región San Martín.
Ciudad de Juliaca, de la región Puno.
Paramonga, perteneciente a la región Lima.
Distrito de Incahuasi, Ferreñafe, región Lambayeque.
Distrito de Chumuch, provincia de Celendín, en Cajamarca.
Distrito de Oropesa, Antabamba, de la región Apurímac
Salpo, Otusco, en la región La Libertad.
TÍTULOS Y CONDECORACIONES
Por otro lado, la sagrada y venerada imagen ha recibido importantes reconocimientos, títulos y condecoraciones como expresión del sentimiento patriótico nacional, como se puede leer en la siguiente relación: En 1730 fue proclamada Patrona de los campos del Perú.
En 1823, durante el gobierno del marqués de Torre Tagle, fue declarada Patrona de las Fuerzas Armadas y Policiales de la República.
En 1921, con ocasión de los actos conmemorativos del centenario de la Independencia nacional, el gobierno de Augusto B. Leguía la proclamó Gran Mariscala del Perú.
En 1971, el presidente de la República, general Juan Velasco Alvarado, le impuso la Gran Cruz al Mérito Naval.
El 4 de febrero de 1985, el Papa Juan Pablo II, durante su visita a Piura, la proclamó “Estrella de la fe y la evangelización”.
UN POEMA DE JOSÉ SANTOS CHOCANO
Tan importante acontecimiento, que marca la vida y actos de grandes multitudes, ha determinado una hermosa producción poética de hondas y profundas manifestaciones, parte de la cual queremos difundir en esta ocasión, como signo de nuestra adhesión a tan hermosa celebración, especialmente en nuestro lar nativo.
Según sostienen los biógrafos, entre ellos Luis Alberto Sánchez, la madre del poeta modernista José Santos Chocano, otuscana de nacimiento, casada con un empresario minero, participaba en las deslumbrantes y originales fiestas patronales de Salpo, adonde alguna vez debió llevar al pequeño y futuro poeta, quien, impactado por la visión de la sagrada imagen salpina, compuso el original poema “Homenaje del poeta”, incluido en su poemario “Oro de Indias II”, hecho extraordinariamente raro, pues el poeta modernista no se caracterizaba por la creación religiosa o espiritual. El texto es el siguiente:
“Virgen de las Mercedes / evocadora imagen de mi antiguo fervor: / recuerdo que de niño, por las céntricas calles / de mi ciudad nativa, seguí tu procesión, / en que hacían escolta centenar de soldados / que lucían, al grave redoble del tambor, / suntuosos uniformes y largas bayonetas / en cuya punta impávida iba temblando el Sol.
Perdido en el tumulto / te seguí siempre yo: / marcialmente marcaba mi paso (el redoblante / sonarme parecía dentro del corazón), / como si me sintiese soldado de la Patria / y marchase a la guerra lleno de fe en mi Dios.
Virgen de las Mercedes, / evocadora imagen de mi antiguo fervor: / este soldado de la patria que siempre entre el tumulto / marcando un pasodoble siguió tu procesión, / quiere al volver de una lucha harto inútil / ir a dejar sus armas ante tu altar mayor / y rogarte que nunca tenga ya que esgrimirlas /porque está fatigado de tanto que luchó…
Pues en mis tierras eres patrona de las armas / y las armas no deben prevaler ya hoy, / tórnalas instrumento de labranza: el arado / te ofrendará una flor, / de la propia manera que la lira vibrátil, / en que trueco mis armas, te ofrece una canción.
Virgen de las Mercedes, / evocadora imagen de mi antiguo fervor:/ no quiero que seas patrona de las armas/ sino patrona solo de la paz y el amor.”
LAS DÉCIMAS DE ANTONIO ESCOBAR
Recientemente, el poeta Antonio Escobar Mendívez, natural de Guadalupe (Pacasmayo), autor del poemario “Santoral”, incluye su creación artística “Virgen de la Merced”, compuesto por un cuarteto inicial y cuatro décimas. Curiosamente, el autor se aparta del tema patriótico, para centrar su creación en la condición de nuestra bendita patrona como protectora de los prisioneros. El cuarteto aludido dice: “Tienen tus manos las redes / del amor y sus cultivos, / patrona de los cautivos / mi Virgen de las Mercedes”.





