Se vienen las fiestas navideñas y los peruanos emprendedores empiezan a comprar productos que esperan poder vender por la llamada “campaña navideña”. Sin duda, es una época en la que luego de un análisis de la demanda; se procede con las adquisiciones de productos con la esperanza de poder vender toda la mercancía y consecuentemente, obtener la rentabilidad o ganancia esperada.
En este escenario es clave conocer si se obtuvo o no los ingresos pronosticados. Para ello, Juan Santivañez, contador, sugiere que los negocios lleven una contabilidad adecuada, acogiéndose a la normativa, para poder concluir si se logró el éxito esperado en ventas. A veces los negociantes basan esta evaluación principalmente mirando cuánto dinero obtuvieron al final, considerando por lo tanto al efectivo como el único activo relevante en esta valoración. Esa mirada, no es una mirada correcta.
La contabilidad es el lenguaje de los negocios y es a través de ella, que podremos conocer la utilidad o ganancia real por cada período de tiempo. Es así que, se debe tener claro que las ventas lo que van a originar es una ganancia de activos, o una reducción de pasivos. Esta ganancia de activos, no necesariamente será efectivo; podría ser activos fijos, productos o cuentas por cobrar; activos que luego pueden ser negociados o intercambiados por otros.
Al respecto, Juan Santivañez Socio, BKR Santivanez, señala: “Impulsar a los peruanos emprendedores a que lleven una contabilidad asertiva es clave para que sus negocios puedan crecer y por consecuencia, expandirse en más puntos del país. Nosotros incentivamos y fomentamos a llevar un control oportuno y óptimo en beneficio de las MYPES y toda empresa que busca crecer en el rubro que se encuentre o quiera emprender”
Cabe señalar que, para determinar la ganancia e incluso el valor de venta, una empresa debería considerar las siguientes reglas básicas:
- Determinar al detalle, el costo de los productos adquiridos.
- Añadir al costo de los productos, el costo del transporte en el traslado de los mismos, hasta que llegan al almacén.
- Incluir, además de los 2 puntos anteriores, al costo directo del producto, todos aquellos costos que tengo que incurrir hasta que el producto llegue a mi empresa.
- Hacer un balance final de todos los costos y añadir la rentabilidad esperada, llegando así al valor de venta que se debe ofrecer.
Luego de todos estos pasos, cada vez la comercialización de los productos será más eficaz y eficiente. Por ello, es muy importante determinar todos los detalles y el costo de los productos adquiridos, por más mínimo que sean. Siguiendo estas recomendaciones y reglas básicas en cuestión de costos, es posible obtener y llevar una rentabilidad responsable en beneficio de los peruanos emprendedores.