El inicio de la etapa escolar es un momento decisivo en la vida de los niños, ya que marca el comienzo de su participación en la vida escolar y social. Este periodo implica una transición significativa, llena de desafíos tanto para los pequeños como para sus padres. Los niños se enfrentan a la adaptación a nuevos horarios, espacios y personas, lo cual puede despertar tanto entusiasmo como nerviosismo. Es por ello que la preparación emocional y los vínculos familiares juegan un papel esencial para que esta etapa sea vivida de manera más sencilla y positiva.
Según Sabrina Vásquez, directora de la carrera de Educación Inicial de la Universidad Autónoma del Perú, “el acompañamiento de los padres en este proceso es fundamental para establecer una base sólida que favorezca tanto el aprendizaje como la integración social del niño”. Este acompañamiento no solo debe centrarse en los aspectos académicos, sino también en el desarrollo de la seguridad emocional y el fortalecimiento de las relaciones afectivas que permiten al niño sentirse respaldado ante lo desconocido.
Como señala Vásquez, la educación inicial no solo es una fase en la que los niños adquieren conocimientos básicos, sino también un espacio clave para el desarrollo de habilidades emocionales, sociales y de autonomía. De este modo, cuando los niños sienten que tienen el apoyo de sus padres y cuidadores en este nuevo contexto, su adaptación al entorno escolar se facilita, permitiéndoles enfrentar los retos con mayor confianza y bienestar.
En esa línea, la especialista brinda 4 recomendaciones para preparar desde casa a los niños que comenzarán con la educación inicial:
- Creen un ambiente de aprendizaje en casa: Provean un espacio tranquilo y organizado donde su hijo pueda explorar y aprender a través del juego. Pueden ofrecer materiales como bloques, pinturas o utensilios de cocina, y dejar que el niño decida cómo usarlos.
- Fomenten la autonomía: Permitan que el niño haga cosas por sí mismo, como asearse, ordenar sus juguetes o ayudar en tareas sencillas de la casa, como poner la mesa. Anímenlo a participar y tomar pequeñas decisiones, para que aprenda a ser responsable de su entorno.
- Fomenten que el niño interactúe tanto con otros niños como con adultos: Organizar momentos para que juegue en grupo o participe en actividades familiares, como juegos de roles o de construcción, le ayudará a aprender a compartir, turnarse y colaborar con los demás.
- Despierten su curiosidad invitándolo a explorar el mundo que lo rodea: Pueden jugar con agua en recipientes o manipular masas de diferentes texturas. A través de estos juegos, el niño aprende mientras se divierte y explora de manera sensorial.
“El inicio de la educación inicial es un momento lleno de emociones para los niños y sus familias. Prepararlos desde casa, fortaleciendo su autonomía, habilidades sociales y amor por el aprendizaje, les dará una base sólida para crecer y desarrollarse integralmente”, concluye la especialista.
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