Los métodos de enseñanza se decantan por los juegos, proyectos en los espacios propios y el desarrollo de habilidades blandas. (Foto: Freepik)
Los métodos de enseñanza se decantan por los juegos, proyectos en los espacios propios y el desarrollo de habilidades blandas. (Foto: Freepik)

La educación dio un vuelco desde que llegó la pandemia. La virtualidad pasó a ser la regla y la metodología de enseñanza se tuvo que adaptar a los nuevos tiempos. Es así como ante la necesidad nacieron proyectos como Aprendo en casa. Con toda la experiencia vivida, ¿cómo se vislumbra este año?

Ahora que vivimos la segunda ola de contagios y se endurecen las medidas de confinamiento, todo indica que nos espera otro año de educación online, o en el mejor de los casos, semipresencial. Después de meses de poner la tecnología al servicio de la educación, todo indica que se debe avanzar al siguiente nivel.

¿Cuáles son las herramientas educativas que estarán en tendencia para el presente año? Jorge Bossio, Director de Aprendizaje Digital y Online de la UPC, se refirió a las tendencias que en algunos casos ya se vienen aplicando.

Una de ellas es el aprendizaje basado en juegos, “porque los alumnos y profesores ya estamos cansados de las videoconferencias largas que abundaron el año pasado”. Esta metodología propone, por ejemplo, plantearle desafíos a los estudiantes, con el concepto del cuarto de escape (escape room), donde debes ir resolviendo enigmas para avanzar y ganando puntaje.

Estos juegos y actividades lúdicas ayudan a que los estudiantes se mantengan conectados. En lugar de mandar a leer un texto, mejor resuelven un reto. “Eso es algo que ha comenzado a calentar entre las estrategias de enseñanza de aprendizaje”, indicó el especialista.

Por otro lado, Bossio señaló que se viene usando la tecnología inmersiva, el uso de videos 360° para que los estudiantes puedan sentirse dentro de un espacio. Y se puede hacer a bajo costo, incluso con lentes hechos de cartón. Esa experiencia también se combina con juegos.

Asimismo viene aumentando considerablemente el uso de podcasts para la enseñanza, y ya existen una serie de herramientas para reemplazar a la pizarra, desde una tableta hasta un Lightboard (pizarra digital). Y en un futuro cercano se espera la integración de los datos entre docentes y estudiantes, para facilitar la evaluación, precisó.

Colaborativos

Fernando Riedel, Regional Product Manager de Lumen, por su parte explicó cómo las herramientas colaborativas como Zoom, Cisco Webex o Microsoft Teams han evolucionado en favor de un mejor entorno virtual para la educación.

“Dentro de esa área, el más representativo es Zoom, pero también Microsoft Teams ya que el 97% de las desktops usan Windows y tienen Microsoft Office instalado”, indicó el vocero que desde su área ofrece soluciones más allá de las herramientas de colaboración, en los campos de contribución, redes y seguridad.

Estas herramientas pasaron de ser para un simple uso de videollamadas a desarrollar funciones como chatear, intercambiar archivos, llamar por teléfono, usar pizarras electrónicas virtuales, detectar ausentismos, ver a los alumnos, estar como moderador o audiencia, o que todos compartan información. Y eso ha facilitado que una educación virtual remota sea una realidad. Y cada vez se incorporan más herramientas para hacerlo más fácil.

Asimismo, las pizarras interactivas donde escribe el alumno o el profesor, son las que tienen una buena expectativa de venta para este año. Incluso hay una función para que el profesor sea ‘transparente’ en la señal que transmite, y los alumnos vean lo que escribe.

Lo que han visto en Lumen con analistas de mercado como Frost and Sullivan e IDC es que se esperaba que esta situación se extienda por más tiempo, y evidentemente está ocurriendo. En encuestas a entidades de la región, el 76% dijo que en el futuro espera que haya un mix entre remoto y presencial, y más del 54% dijo que podría estudiar o trabajar de manera remota.

Cambio de chip

Jorge Bossio mencionó otros elementos no necesariamente tecnológicos, pero que también forman parte de las nuevas tendencias de la educación para los próximos meses. Uno que requiere un cambio de chip, es romper el esquema de las horas.

“Sabemos que la educación se mide por horas de estudio y no por logros de aprendizaje. Así está la regulación, tantas horas por un crédito, tantos créditos por una carrera. El tema es romper ese esquema y comenzar a quitarle horas a las clases teóricas, y empezar a trasladarlas a proyectos, tanto en colegios como en universidades”, subrayó.

El reto para los alumnos es que resuelvan un problema en el espacio donde se encuentren, y en el que puedan aplicar los conocimientos como física, matemática, diseño, entre oros. El experto señala que ya se viene aplicando en algunos colegios con excelentes resultados.

Otro cambio es la forma de evaluar al estudiante, “El reto de la educación este año son las competencias blandas y cómo evaluarlas en el entorno online”, refirió.