Mercado de aplicativos en el país moverá alrededor de S/ 100 millones este año

En los dos últimos años el desarrollo de webs y aplicativos en el país ha sido exponencial, con incrementos entre 200% y 250%, estima Diego Dueñas, fundador de Gózzalo, la app que le permite a los usuarios acumular tiempo en casa y convertirlo en descuentos.

Pero, la pandemia ha propulsado aún más estos emprendimientos, especialmente, los vinculados al comercio electrónico como retail, proyectos de tecnología; servicios logísticos (reparto y almacén); asesorías contables, consumo masivo, gastronomía (delivery), empresas de taxi; marketplaces, pasarelas de pago y al rubro de belleza, entre los principales.

“La evolución tecnológica, de la mano de las nuevas necesidades, ha dado pie a que las empresas tradicionales den este salto tecnológico y a que muchas startup surjan con distintas propuestas”, comenta.

No obstante, precisa que pese a esta abrumadora expansión, aún el Perú se mantiene, probablemente, como el mercado con la menor cantidad de empresas tecnológicas (relacionadas a app y webs) de la región, asegura.

Destaca que, aunque no hay cifras oficiales ni un estudio a profundidad, se calcula que solo el mercado de aplicativos en el consolidado del 2020 moverá un aproximado de S/ 100 millones, el doble de lo que se registró en el pasado ejercicio.

INVERSIÓN

En cuanto a los montos de inversión, Dueñas sostiene que esta varía según el tamaño del emprendimiento y el nivel de usuarios al que se quiera llegar.

“Básicamente se tiene que invertir en la mano de obra, es decir, el equipo tecnológico y desarrollo del software, adquisición y retención de usuarios y en los gastos propios del lanzamiento”, explica.

Comenta que marcas extranjeras como Rappi o Glovo llegan al país, usualmente, con una inversión alrededor de los US$ 10 millones a US$ 15 millones.

“Estos son aplicativos que ya están en una serie de inversión A y que han recibido millones de dólares en su apalancamiento”, dice.

En el caso de los emprendimientos peruanos, informa, la idea es que su lanzamiento no cueste mucho ni tome mucho tiempo y que la adquisición de usuarios sea los más económico posible, hasta llegar a un punto de quiebre, en donde se pueda invertir en vincular al cliente y en equipo tecnológico.

“En la primera etapa es importante ser totalmente eficientes con los recursos para luego, en el mejor de los casos, despegar de la mano de un fondo de inversión, que es lo que toda startup busca en su curva de crecimiento”, asegura el empresario.