Este domingo electoral se define el destino del país por los próximos cinco años, en un periodo clave al iniciarse los 200 años de República. Más allá de cuál sea la opción elegida, lo que se espera es que se retome el crecimiento económico, apalancado por el crecimiento de los principales sectores productivos.
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Conversamos con tres exministros de carteras claves como son Agricultura, Minería y Educación. Ellos explican la perspectiva que debe seguir el próximo gobierno para darle mayor impulso a la economía del país.
Agricultura - Juan Manuel Benites
El exministro señala grandes líneas que serán consideradas y mantenidas como políticas de Estado para el desarrollo del sector agrario, el mismo que ocupa un lugar central en la estrategia para generar empleo y reducir de forma sostenida la pobreza. Para ello está la Política Nacional Agraria (PNA) cuyo objetivo es lograr el incremento sostenido de los ingresos y medios de vida de los productores y productoras agrarios, priorizando la agricultura familiar.
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A su criterio, ocurre que la estrategia de cierre de brechas que actualmente gobierna la programación de inversiones diseñada por el MEF es “miope”. Por lo que se requiere una mirada que conecte la competitividad territorial con el gasto público y la inversión privada, para aprovechar las potencialidades de un determinado espacio geográfico.
En ese sentido, Benites indicó que no puede continuarse con la asignación de presupuestos con esa mirada fraccionada por sectores y centralista, tal como se señala en el Plan Nacional de Agricultura Familiar 2019-2021 (PLANAF 2019-2021) con recursos cercanos a los 10 mil millones de soles. Propuso en cambio la implementación del PLANAF a nivel territorial.
“El objetivo de esta reforma será sustituir la mirada sectorial por la integración de territorio, convirtiéndose en una gran herramienta de focalización de gasto y generación de impacto para apuntalar de manera efectiva la descentralización”, refirió.
En cuando a los bajos niveles de penetración de los servicios financieros formales en el sector agrario señaló que las principales causas son la ausencia de garantías crediticias, la falta de derechos de propiedad y el incumplimiento de pagos anteriores. Sugirió mecanismos de cofinanciamiento de planes de negocios entre los productores organizados y el Estado, con “fondos no reembolsables a agricultores que no logren acceder al crédito”.
Otro de los puntos es diseñar estrategias para mitigar los impactos de fenómenos climáticos en el sector, así como fortalecer los niveles de asociatividad de los productores agropecuarios.
Para Benites, la estrategia debe tener como eje central al recurso hídrico, por lo que es imprescindible contar con un Programa de Desarrollo del Riego en la Sierra, orientado a evaluar la aptitud del suelo y clima como factores del desarrollo agrícola.
Por otro lado, el exministro de Agricultura dijo que se debe continuar “con los esquemas de Asociaciones Público-Privadas (APP) de los proyectos Chavimochic tercera etapa, Majes Siguas segunda etapa y Olmos, así como las Iniciativas Privadas Cofinanciadas (IPC) en el valle de Ica, en el valle Chancay en Lambayeque, afianzamiento del reservorio de Poechos y desarrollo agrícola en las cuencas de los ríos Piura y Huancabamba en Piura”.
Minería - Amado Yataco
Para empezar, señaló que el Estado debe ser plenamente consciente de los beneficios de esta actividad, que ofrece el 60% de las divisas al país, sin contar el beneficio que genera a los sectores económicos como industria, comercio, construcción y transporte, y los millones de puestos de trabajo formal que genera. “Esto, sin considerar los tributo”, refirió.
Dicho esto, Yataco cree que se debe recomponer lo que llama el triángulo del éxito en la minería, por un lado la comunidad donde está el yacimiento, el Estado y la empresa. Cuando estos tres elementos se ponen de acuerdo, tenemos éxito asegurado, indicó, como hemos tenido en Antamina, en Southern, y en la gran mayoría de proyectos.
Un punto clave que puntualizó el exministro de Energía y Minas en esa línea es recuperar el principio de autoridad, “como una cuestión sociopolítica que el Estado debe encabezar y cumplir con su rol tuitivo, buscando la paz social, combinando diálogo, con apoyo en materia de desarrollo social”.
Asimismo, habló de tener un planeamiento que permita visualizar el desarrollo de la cartera de los proyectos mineros. Para Yataco, hay dos proyectos significativos: Quellaveco y Marcobre. Y hay otros simbólicos como Corani, que no tienen tanto peso.
“A medida que estos dos yacimientos avancen, el horizonte de corto plazo no se vislumbra porque no hay un panorama en donde el Estado propicie la inversión minera con paz política y social y procedimientos que sean alentadores, respetando el medio ambiente, y sin dilatar los procesos, con aprobaciones de estudios de impacto ambiental”, argumentó.
También se refirió a la consulta previa como repetitiva y carente de sentido, porque las empresas antes de mover un dedo deben llegar a un arreglo con la comunidad, entonces, a su manera de ver, es redundante y genera demoras e incertidumbre.
Finalmente, precisó que no se deben tener ministros improvisados, sino gente honesta y manejarse gerencialmente con un sistema de control adecuado, previendo asuntos de corrupción dentro de la función pública.
Educación - Idel Vexler
El exministro de Educación hizo un listado de las prioridades educativas que debieran ser consideradas para el periodo gubernamental 2021-2026. Comenzando por asumir un modelo educativo claramente definido.
“En ese sentido, el Proyecto Educativo Nacional (PEN) al 2036 plantea cuatro propósitos: vida ciudadana, inclusión y equidad, bienestar socio-emocional, y productividad-investigación-desarrollo sostenido. Es a partir de estos horizontes y de la realidad de nuestro sistema educativo que se debe mantener lo que está bien, mejorar lo que está avanzando y cambiar lo que está mal”, indicó el docente.
En esa línea, resaltó la necesidad de reformar la educación secundaria debido a su actual desorganización y bajos resultados de aprendizaje; fortaleciendo la reforma magisterial revisando la pertinencia de las evaluaciones, las capacitaciones y optimizando, en base a méritos, los haberes de los profesores.
En cuanto a la educación presencial, se debe favorecer la autonomía de las escuelas y dotarlas de condiciones de educabilidad. Todo desde una perspectiva que tenga en cuenta calidad, diversidad interculturalidad e inclusión.
Para Vexler es indispensable reorganizar el Minedu y todo el sector Educación para buscar eficacia en la gestión institucional, pedagógica y presupuestal con asignación creciente de recursos económicos, dejando de lado las reiteradas asesorías y consultorías.
Otro punto clave es declarar en emergencia la infraestructura educativa durante cinco años para avanzar en la construcción y mantenimiento de espacios pedagógicos apropiados. “Y si bien la SUNEDU está cumpliendo bien sus funciones y debe mantenerse, es conveniente además una reforma integral de la educación superior y el fortalecimiento de la universidad pública”, sostuvo.
Propuso también hacer un convenio entre el Minedu, MTC y las compañías de telefonía para un programa del celular de bajo costo con conectividad para estudiantes y maestros. Esto en el marco del mejoramiento en calidad y cantidad de las clases a distancia de Aprendo en Casa.
Los maestros de calidad y con experiencia en las escuelas, institutos y universidades deben ser convocados para generar una educación pertinente con la realidad educativa, refirió Vexler. Para así tener equipos multidisciplinarios con educadores profesionales con altas capacidades y experiencias.
Por último, recomendó crear el Instituto Nacional de Educación a Distancia del Ministerio de Educación (INNED) y restablecer urgentemente la Dirección Nacional de Tutoría y Bienestar.