En un comunicado de prensa, Petroperú informó que la Unidad de Flexicoking (FCK) de la Nueva Refinería Talara (NRT) estará paralizada por 90 días, entre el 30 de marzo y 30 de junio próximo.
Precisó que esa unidad presentó problemas desde febrero último y se paralizó sus operaciones desde fines de marzo último.
La paralización de la FCK, precisó, fue consecuencia de la falla del Sistema Eléctrico Interconectado Nacional (SEIN), el 1 de marzo pasado, cuando se produjo la parada total del complejo de refino.
Explicó que se ha paralizado la FCK para que se hagan las labores de inspección y reparación, y se estima que se demorarán unos 90 días.
La empresa también precisó que mediante sus distintas plantas de procesamiento está operativa al 76% de su capacidad de producción, indicando que a la fecha se está produciendo combustibles como Turbo A-1 (el que se utiliza para los aviones), diésel, gasolina, GLP y residuales.
Engaño. En ese sentido, César Gutiérrez, ex presidente de Petroperú, dijo a Correo que la falla del SEIN, que derivó “en la parada total de la NRT, demuestra que su unidad de cogeneración eléctrica, con capacidad suficiente para abastecer el 100% de la planta, no funciona”.
Una vez más, prosiguió, se confirma que el anterior directorio ha mentido a la opinión pública, diciendo que la NRT estaban operando al 100%, pero la Unidad de cogeneración eléctrica no habría estado operativa, de lo contrario la FCK seguiría operativa.
“La unidad de cogeneración eléctrica está diseñada y construida para el autoconsumo de la refinería, inclusive debería tener un excedente para incorporarlo al SEIN”, precisó Gutiérrez.
Refirió que si bien el problema de la refinería de Talara “la está heredando del anterior directorio”, es importante que Petroperú emita una mayor información del proceso que busca sanear las finanzas de la empresa.
Pérdida. En esa línea, el especialista en hidrocarburos indicó que al no operar el FCK, la producción de residuales se incrementa al 30%, un volumen que deja pérdidas operativas porque el precio de venta en el mercado de este combustible está por debajo del costo del insumo de entre 15 y 30%, lo que significa una caída significativa del margen de refinación (que es la ganancia que necesita la empresa petrolera para salir de la crisis).
Gutiérrez explicó que todo lo contrario sucede con el diésel, cuyo precio de venta en el mercado es 50% mayor al costo del insumo.
Gutiérrez refirió que esa situación le generará pérdidas de utilidades brutas a Petroperú, tal como sucedió en 2023 .
Es decir, según explicó, en junio 2024 Petroperú tendrá serias dificultades para pagar los $170 millones de los intereses de los bonos que emitió (mediante el cual tomó recursos y se endeudó), además de pagar el capital e intereses del crédito sindicado que avaló la Agencia Española de Crédito a la Exportación (CESCE).
