Existe un alto nivel de competencia en la industria de la comunicación móvil (Foto: Andina)
Existe un alto nivel de competencia en la industria de la comunicación móvil (Foto: Andina)

El regulador (Osiptel) está yendo en sentido contrario a la tendencia que tiene el mercado de telecomunicaciones en el mundo, en el que existe una gran competencia, sobre todo en la industria de la comunicación móvil, dijo Nino Boggio, gerente central de Legal, Regulatorio y Relaciones Institucionales de Entel Perú.

Refirió que en la actualidad existe una sobre regulación, no obstante la gran competencia que registra el mercado, que está encareciendo los costos de operación de las empresas y puede frenar la inversión. “En la medida en que el retorno de la inversión es más atractivo, los accionistas (de las empresas) están más dispuestos a invertir, precisó.

A su vez Alexis Licci, CEO de Entel, señaló que la industria de la comunicación móvil en el país registró una caída de 5% entre enero-setiembre de este año frente al mismo período del 2022 (en ingresos).

Agregó que el 2023 es un año muy difícil, que si bien se está saliendo de una alta inflación, se registra un bajo consumo de los peruanos, particularmente de equipos móviles, cuyas ventas registran una caída de 20%.

“Hay un gran stock (de equipos móviles) al punto que este fin de año puede haber una liquidación”, comentó.

Multas. Boggio explicó que la sobre regulación que se está aplicando a un mercado muy competitivo no tiene sentido, menos aún si se apela a las multas antes que aplicar medidas correctivas que favorezcan a los usuarios de los servicios móviles.

“Las multas que aplica el regulador no se va al sector, sino al Tesoro Público, no beneficia al usuario”, manifestó en conferencia de prensa.

El ejecutivo señaló que se exige a las empresas con una serie de obligaciones; “las empresas pueden hacer esfuerzos por mejorar la cobertura y la calidad del servicio, pero no, se les aplica multas que cada año son más altas, lo que no estimula la inversión”.

Refirió que se pide que el regulador aplique el modelo que está vigente en todos los países del mundo, que es el de una menor regulación porque los adelantos tecnológicos generan una fuerte competencia entre las empresas del mercado.