Los implicados fueron trasladados de la sede de la Policía Anticorrupción a la Corte de Arequipa. (Foto: captura video Corte Superior de Justicia de Arequipa)
Los implicados fueron trasladados de la sede de la Policía Anticorrupción a la Corte de Arequipa. (Foto: captura video Corte Superior de Justicia de Arequipa)

La Segunda Sala Penal de la Corte de Arequipa a las 8:20 horas de hoy(29 de octubre) dio por iniciada la instalación de la audiencia de apelación de detención preliminar por diez días de doce de los quince investigados en el caso Los Hijos del Cóndor.

Los implicados fueron trasladados de la sede de la Policía Anticorrupción a la Corte de Arequipa (Cercado). A su salida, el gobernador regional de Arequipa, Elmer Cáceres, dijo confiar en la justicia local.

Los investigados llegaron en tres vehículos de la Policía Anticorrupción a las 8 horas al local de justicia.

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Tras la acreditación de sus defensas legales, la Sala dio inicio con la audiencia. El Ministerio Público inició con la sustentación de los presuntos actos ilícitos del gobernador; gerente general, Gregorio Palma, entre otros altos funcionarios implicados.

Algunos detalles de la investigación

Durante la exposición de la fiscal superior María del Rosario Lozada se explicó algunos de los roles que cumpliría la organización criminal, tal sería el caso del gobernador regional, Elmer Cáceres Llica, quien al parecer era el líder de la misma ya que ofrecía los beneficios y terrenos. Los consejeros se alinearon y formaron la Asociación Criminal que lideraría el gobernador de Arequipa, que fue quien la constituyó y era el encargado de dirigir y supervisará porque tenía la posibilidad de proponer y manejar colocación de cargos, presupuesto para obras y hectáreas de terrenos.

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En el caso del gerente general del gobierno regional, Gregorio Palma, sería quien reforzaba y promovía lo que ofrecía la autoridad regional en favor de sus intereses, también apoyó la entrega de terrenos, designación de funcionarios y que los consejeros votarán conforme se planeaba y librando de interrelaciones a gerentes.

Marcelo Córdoba, quien estaba como gerente de Autodema, es cómplice primario en cohecho y formaría parte de la organización al promover lotes de la asociación agroindustrial a consejeros, por su nombre y del gobernador para evitar que lo interpelaran. A Cáceres Llica le interesaba tenerlo porque era pieza clave para el manejo de dicha entidad y entrega de terrenos.

Llaiqui que era representante ante la comisión anticorrupción, la fiscalía lo considera cómplice primario y secundario al permitir la colocación de funcionarios de confianza de terceros a favor de los consejeros en unidades formuladoras de proyectos, red de salud y otras áreas.