Luis Apaza Condori de 18 años, había dejado sus estudios para trabajar como minero y apoyar económicamente a su familia, sin embargo, el internarse en una mina abandonada para buscar mineral, le costó la vida.
El joven natal del distrito de Huanuhuanu, Caravelí, conoció a otras tres personas que tenían el mismo propósito, trabajar en una mina por lo que la semana pasada arribaron a la ciudad de Arequipa y emprendieron camino hacia la provincia de Caylloma, donde hallaron una mina abandonada ubicada entre los sectores de Sumbay e Imata, en la vía Arequipa - Puno.
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La noche del viernes 23 de agosto, ingresaron al socavón y durante su exploración comenzaron a sentirse mareados y a perder fuerzas, por lo que salieron al exterior por una de las chimeneas.
El grupo caminó hasta la carretera en busca de ayuda y desde allí los evacuaron de manera particular hacia el hospital Honorio Delgado Espinoza, a donde ingresaron durante la madrugada del sábado. Luis Apaza fue el que más afectado, pues ingresó sin signos vitales, aparentemente su muerte fue provocada por la inhalación de gases tóxicos al interior de la mina.
Los restos del joven trabajador fueron trasladados a la morgue central de Arequipa y de allí fueron retirados por sus familiares, quienes lo retornaron hasta el distrito de Huanuhuanu para darle sepultura.
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