Más de 500 vecinos de las asociaciones Apipa y José Luis Bustamante y Rivero del distrito de Cerro Colorado llegaron al campamento de reservorio N-31 para respaldar el proyecto de redes de agua potable y desagüe para 11 mil 500 conexiones a viviendas.
Los dirigentes de los pueblos jóvenes anunciaron que no permitirán que el proyecto se paralice por actos de vandalismo que se registró el 24 de noviembre por parte de un grupo de obreros del sindicato de Construcción Civil, que exigen la contratación de sus asociados.
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Seguirán apoyando el proyecto
Néstor Laura, presidente de Apipa, se mostró preocupado por la presunta extorsión de la que estarían siendo víctimas los encargados de la obra.
Según el dirigente, los obreros solicitan que el 90% del personal que labore en la obra sea del sindicato de construcción civil. Señaló que defenderán el proyecto debido a que la mayoría de los pobladores tienen conocimiento en obras de construcción y desean un puesto de trabajo en el reservorio.
mesa. Los representantes de la empresa constructora y los dirigentes acordaron instalar la mesa de diálogo el martes 30 de noviembre a las 14:00 horas. Acordarán el número de obreros a contratar.