La unidad de hemodiálisis del hospital Honorio Delgado Espinoza se encuentra como un paciente enfermo que se deteriora progresivamente con un riesgo continuo de colapsar, a la espera de remedios para curar sus dolecias.
El hospital tenía 37 máquinas de hemodiálisis, pero con el paso de los años fueron cayendo una tras otra. A marzo del año pasado, solo 12 habían sobrevivido, cinco de estas dejaron de funcionar en el último año, tres de ellas tuvieron que ser retiradas del servicio esta semana.
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Para poder atender a 110 pacientes, se han abierto cinco turnos durante las 24 horas del día. Las 7 máquinas sobrevivientes tienen cerca de 20 años y según el jefe del departamento de hemodiálisis, José Gonzales Polar, por norma todo equipo debe ser renovado cada siete años. “Han dado tres veces más su vida útil y si seguimos así vamos a colapsar, lo que está en riesgo es la vida de los pacientes”, sostuvo el especialista.
Entre los equipos vigentes está uno móvil que utilizan al interior del hospital para dializar a los pacientes que están internados en unidades críticas como los internados en UCI. “Esa máquina también está fallando y es crítico porque si no se dializa a estos pacientes se mueren. Y en cuánto tiempo podría pasar esto si se deja de tratar al paciente, depende de su condición. Las vidas de los pacientes críticos están expuestas” dijo González Polar.
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Hace poco más de un año, el personal de la unidad de hemodiálisis del hospital Honorio Delgado Espinoza expuso públicamente la crisis en la que se encontraba el servicio; tenían problemas para atender a los centenares de pacientes renales crónicos por la pérdida de más de la mitad de las 37 máquinas que tenían para desintoxicar a las personas. Hoy, aunque están al borde del colapso, el Gobierno Regional de
Arequipa ha pedido 45 días más para poder comprar una parte del equipamiento. El propio gobernador Rohel Sánchez prometió atender a la brevedad posible el grave problema y a mediados del año pasado desde el hospital regional se envió al Gobierno Regional de Arequipa el proyecto completo para la adquisición de una parte de las máquinas y la reparación de otro grupo, pero no se concretó.
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Esta semana, la autoridad regional visitó el hospital Honorio Delgado Espinoza y entre otras áreas, también echó un vistazo a la antigua área de hemodiálisis.
A través de un comunicado, el Gobierno Regional de Arequipa informó que recién pudieron superar los “engorrosos trámites administrativos”, para iniciar desde el próximo lunes el proceso de compra de una parte de las máquinas que es la única manera que tienen los pacientes renales para no perder la vida. La otra opción es acceder a un trasplante de riñones, pero son pocos los donantes y muchos están a la espera de poder acceder a los órganos.
La promesa desde el Gobierno Regional también es que en los próximos 15 días se puedan arreglar al menos dos de las máquinas malogradas, en el comunicado del GRA se menciona que se ha comprometido 30 mil soles por cada equipo a reparar. En el hospital se muestran escépticos de que se pueda cumplir el compromiso, ya que desde el año pasado se asignó 600 mil soles para este proceso, pero solo se utilizó parte de estos recursos para arreglar, hasta el momento, las bombas de agua que se utilizan para el proceso de la diálisis.
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La única opción que queda en el servicio de hemodiálisis para atender a los pacientes si es que otra de las máquinas comienza a fallar, en tanto se arreglan las malogradas y se espera el largo camino que aún queda por tener las nuevas, es derivarlos hacia una clínica privada. Sin embargo, para que los pacientes sean aceptados, primero deben pasar por una serie de exámenes serológicos para garantizar que están libres de cualquier enfermedad.
Aquí también hay complicaciones, pues en el hospital, según dijo el médico Gonzales Polar, no tiene algunos de los insumos necesarios para estas evaluaciones y el costo para hacerlo en un laboratorio privado es de por lo menos 150 soles.
“Nosotros atendemos a los pacientes más pobres a través del Seguro Integral de Salud y si no pueden hacer sus exámenes en el hospital será complicado que lo puedan hacer afuera por el costo que tiene”, sostuvo el especialista.