El Triduo Pascual comenzó este Jueves Santo en Huancavelica con una misa en la Iglesia Catedral de Huancavelica, la misma que fue presidida por el obispo de la región, Monseñor Carlos Salcedo Ojeda.
Luego de la misa, el prelado llevó la Hostia Sacramentada ante el Monumento preparado previamente para conmemorar Jueves Santo.
En esta ocasión, el alcalde Toribio Castro Cornejo junto a tres de sus regidores fueron los encargados de llevar el palio, que es una forma de dosel ubicado entre cuatro varas largas.
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Mientras el coro tocaba música sacra, bajo el palio, el obispo de Huancavelica llevó la Sagrada Hostia hacia el monumento, el público aguardaba de rodillas.
Sin embargo, La Catedral no fue la única iglesia donde se realizó esta ceremonia, a la misma hora, también en el templo más antiguo de la ciudad, el de Santa Ana, realizaban una misa previa antes de colocar al Santísimo Sacramento en el Monumento preparado previamente por entusiastas devotos.
Durante su homilía en la Iglesia de Santa Ana, el padre Wilder Venegas, explicó que esta tradición significa que los altares se han preparado en cada iglesia para orar con el Señor.
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“Se han preparado los monumentos donde nuestro Señor Jesús se va a quedar con nosotros, oremos”, afirmó el párroco de Santa Ana.
En varios templos, los fieles dejaron velas cerca de los altares, sin embargo, a manera de prevenir accidentes, algunos instalaron lugares especiales en las afueras y así los devotos puedan iluminar su fe.
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Otras parroquias en la que también sus fieles demostraron su creatividad para elaborar altares en el primer día del Triduo Pascual, fueron Ascensión, San Sebastián, San Cristóbal, Santo Domingo y el Asilo de Ancianos Santa Teresa de Jornet.
Pese a que todos los años sí se abría el templo de San Juan de Dios, este año permaneció cerrado, a pesar de ello, los fieles dejaron velas en la puerta.