Actos delictivos no se cometen solo en las calles, también en algunos puestos del mercado ubicado en la cuadra 12 de la Av. Ferrocarril. Esto quedó en evidencia durante el operativo realizado por los fiscalizadores de la Unidad de Pesos y Medidas de la Gerencia de Promoción Económica y Turismo el pasado fin de semana. La investigación reveló el uso de balanzas descalibradas y un método sofisticado de manipulación electrónica del peso por parte de los comerciantes, afectando principalmente a los compradores de carne.
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Según información de la gerencia, se detectó que un comerciante empleaba un control remoto para alterar los valores de la balanza de manera discreta pero significativa. Este dispositivo permitiría modificar el peso registrado en la balanza, generando una pérdida desde 200 hasta 400 gramos por cada kilogramo de carne vendido, lo cual constituye una práctica ilegal y fraudulenta.
La jefa de la Unidad de Pesas y Medidas, Aida Salvador Inga, fue testigo directo del fraude cuando realizó una prueba con una pesa de 2 kilogramos, la cual inicialmente registró un exceso de 800 gramos. Tras intervenir, el peso volvió a ser correcto, lo que llevó al decomiso inmediato del control remoto y la balanza manipulada.
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Expertos técnicos en balanzas digitales confirmaron que muchos comerciantes están utilizando dispositivos similares para alterar el peso de productos como carne, afectando así a los consumidores y la economía local.
“La señal más visible para los compradores es un segundo cuadro digital parpadeante en la balanza, difícil de eliminar, lo cual indica manipulación electrónica”, señaló Salvador Inga.
