Los vecinos corrían desesperados por el pasaje Diego Terrel, cargando baldes, tinas y ollas con agua, con las cuales increíblemente, tenían que llenar el cisterna de los bomberos, cuyos voluntariosun almacén de abarrotes, ubicado en la cuadra 7 de la avenida Tahuantinsuyo, en el distrito de El Tambo.

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“Ya pasó más de una hora y solo llegó un cisterna de los bomberos de El Tambo, es injusto que nos maltraten de esta forma, los vecinos nos organizamos y hemos cargado baldes con agua, mangueras, para llenar el cisterna de El Tambo y apoyar a los bomberos “, exclamó una vecina indignada.

Mientras, que al interior del local, era un infierno, donde las llamas de fuego consumían todo a su paso.

Investigan las causas

Los bomberos recorrieron varios hidrantes, de El Tambo y Huancayo que no funcionaban o no tenían presión, el único que servía para dotar del elemento líquido, está ubicado en el sector de la Ribera en Huancayo.

El siniestro comenzó al promediar las 10 de la mañana, aunque no se determina aún, la causa del incendio, lo cierto es que en un techo contiguo, la policía y el serenazgo de El Tambo, hallaron un carnero al palo, que era cocinado en una fogata de carbón y se presume que una chispa, saltó hacia el techo del almacén y luego al interior del inmueble, que estaba lleno de productos inflamables.

“Acá se almacenan solo víveres y otro tipo de objetos que no funcionan, no sabemos que habría iniciado el incendio, esperamos que se realicen las investigaciones”, dijo el dueño del almacén, Héctor Arroyo, que abastece de productos alimenticios y equipos de seguridad para las minas.

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Del local se sacaron balones de gas de 120 kilos, tres vehículo de la cochera, maletas con trajes típicos, congeladoras, estantes, muebles, javas de plástico, gaseosas, entre otros, dijeron los serenos tambino. Todo quedó en la avenida Tahuantinsuyo protegido con una cinta amarilla.

“Ustedes son testigos, que para apagar el incendio, los vecinos han tenido que llenar el cisterna trayendo agua en balde desde sus casas, no es la primera vez que sucede esto, toda la vida tenemos que rogar para que nos abastezcan de agua, el cisterna de Sedam llegó después de dos horas de ocurrido el incendio y no había ni motor para sacar el agua y otra vez, los vecinos han tenido que llenar con baldes el cisterna “, señaló Manuel Madueño Cárdenas, comandante regional de los bomberos, tras el siniestro.